Finalmente, ante las especulaciones de que dos de los rugbiers –Enzo Comelli y Matías Benicelli– fueran sumados como coautores del homicidio de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, la fiscal Verónica Zamboni pidió que esa imputación rija para los ocho detenidos y que los dos liberados –Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino– sigan siendo considerados partícipes necesarios, imputación que ya tenían y que no cayó por haber recuperado la libertad. Sin embargo, esto no indica que volverán a prisión, aunque las posibilidades de que esto suceda aumentaron.
De este modo, los ocho acusados como coautores del crimen serían Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Blas Cinalli, Ayrton Viollaz, Lucas Pertossi y Luciano Pertossi. La calificación que les cabe es “homicidio doblemente agravado por su comisión de alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas" cuya pena es la prisión perpetua.
En su pedido para incluir a todos los detenidos como autores materiales del asesinato, Zamboni hace un breve repaso de los ocurrido esa noche: “Se abalanzaron sobre Fernando Báez Sosa aprovechando que se encontraba de espaldas e indefenso y actuando sobre seguro en virtud de la superioridad numérica y física existente. Comenzaron a propinarle golpes de puño en su rostro y cuerpo, lo cual provocó que la víctima cayera primero arrodillada y luego al piso inconsciente”.
También ratifica que el ataque fue “con el fin de darle muerte y cumplir lo pactado” y que por eso le pegaron “varias patadas en el suelo en su rostro y cabeza, causándole lesiones corporales internas y externas, que le provocaron su deceso de forma casi inmediata, al causarle un paro cardíaco producido por shock neurogénico debido a traumatismo grave de cráneo”.
La fiscal subraya que entre los diez rugbiers hicieron todo lo posible para que Fernando no se pudiera defender: “Rodearon a los amigos que estaban parados junto a él con el fin de dar muerte a la misma, aplicándoles golpes de puño y patadas en el cuerpo mientras pretendían ayudar a Fernando, causándoles a algunos de ellos lesiones corporales”.
“Los sujetos activos se dieron a la fuga del lugar para lograr su impunidad, siendo aprehendidos por personal de la Seccional Primera Villa Gesell en las inmediaciones del lugar durante el relevamiento vecinal”, concluye el pedido de Zamboni.
A partir del miércoles 19 de febrero, la fiscal indagará a los ocho detenidos. Por otro lado, a fin de mes, estarán los resultados del peritaje scopométrico que determina quién dejó su pisada en el rostro y el mentón de la víctima.
A medida que la causa avanza, Hugo Tomei, abogado de los rugbiers, va afilando su estrategia. En sus últimas declaraciones, el letrado sostuvo que van a recusar a la fiscal del caso y que a los acusados les corresponde el principio de inocencia.
“Los chicos no saben por qué están privados de su libertad. Desde el Estado se les está imputando un delito o una calificación legal que le puede quitar la libertad. Tengo toda la información sobre lo que pasó y no puedo creer que en los medios se armen debates tan duros”, aseguró.
Sobre la indagatoria del miércoles, Tomei dijo que van a apelar e insistir en el debido proceso legal. “No puedo juzgar un video o una sentencia si mis defendidos no tuvieron el espacio de explicarlo. Cuando ellos tengan la posibilidad de declarar, van a explicar cada uno su situación”, manifestó.
Luego, habló de sus defendidos y dijo que su seguridad así como su integridad psíquica y física peligraba en la cárcel. Además criticó la cobertura del caso. “Hay una cuestión en los medios de comunicación de generar más violencia", dijo.