Un delincuente fingió ser un pasajero, se subió a un taxi en pleno centro porteño y amenazó al chofer con una arma blanca para quitarle la recaudación y sus efectos personales.
Lo que nunca se imaginó es que ese acto delictivo iba a quedar grabado en la cámara de seguridad que el taxista había instalado en el interior del auto y que su cara iba a quedar en un primer plano.
El supuesto pasajero fue levantado en la intersección de Cerrito y avenida Córdoba. “Me dijo que iba a Derqui y Medina, a la casa de la sobrina. Como no tenía idea por dónde ir, puse el GPS y me dijo que fuera por donde quisiera”, relató Darío, el taxista, a TN.
“Me contaba que trabajaba por la zona, por lo que pensé que podía ser cocinero o mozo ya que hablábamos sobre recetas de cocina”, recordó. Pero a mitad de camino, todo se salió de control y cuando estaban por llegar a avenida Eva Perón y Derqui se concretó el robo.
Tal como puede apreciarse en las imágenes, mientras el ladrón le daba las indicaciones al taxista del lugar donde quería que estacionara el auto para dar por finalizado el viaje y le preguntaba cuánto debía abonarle, sacó un cuchillo, lo agarró del cuello y le exigió sus pertenencias.
“Quedate quieto, dame todo porque te mato, ¿está bien?”, le dijo el delincuente al taxista sin advertir la cámara, que registraba lo que sucedía adentro y afuera del vehículo.
“Está bien, está bien”, le respondió el hombre para evitar que el ladrón se pusiera nervioso. Tras sufrir el arrebato del dinero, el chofer le explicó que no tenía más nada para darle, a lo que el ladrón le pidió que le diera su billetera y su celular.
“Dame el celular que tiraste ahí. Dame, dame o te mato. Dale, dame el celular que tiraste ahí atrás”, insistía el malviviente. Y al ver que al taxista se le complicaba agarrar el celular y se excusaba con la frase “no lo puedo agarrar”, el ladrón volvió a amenazarlo de muerte. “Agarralo porque te mato”, se lo escucha decir en la filmación.
Poco conforme con el botín que había conseguido, le reclamó que también le diera su bolso. “No, que tengo los documentos”, le suplicó el chofer; por lo que el delincuente le solicitó que conservara sus documentos a cambio de que sacara el dinero que había en su interior.
Antes de bajarse del taxi para darse a la fuga, el ladrón le ordenó: “Tomate el palo y andá para allá”. El asalto se concretó en apenas dos minutos.
“Es un problema que tenemos a menudo en la calle”, se lamentó Darío, quien decidió poner la cámara de seguridad porque es habitual que los autos crucen en rojo o que los peatones se le tiren encima.
“Puse la cámara de seguridad porque se cruzan en rojo todo el tiempo o andan drogados caminando por la calle y se te tiran arriba del auto, y tenés que tomar recaudos”, explicó.
Una vez hecha la denuncia en la comisaría, se comunicaron con él desde la Fiscalía para pedirle que aportara el video para tratar de dar con el paradero del delincuente.
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