Las pericias clave que se iniciarán hoy por el crimen de Fernando Báez Sosa

Son a los celulares y las ropas de los 10 rugbiers de Zárate detenidos por el homicidio en Villa Gesell. También continúa la rueda de reconocimiento

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(Christian Heit)
(Christian Heit)

La causa judicial por el crimen de Fernando Báez Sosa inicia hoy una semana clave: comenzarán una serie de peritajes sobre los celulares y las ropas de los 10 rugbiers de Zárate detenidos y acusados por haber matado a golpes al joven de 18 años la madrugada del sábado de la semana pasada a la salida del boliche Le Brique, en Villa Gesell.

Fuentes judiciales informaron a Infobae que con esas estas medidas de prueba se busca reunir más información a la imputación. Las pericias se suman a la rueda de reconocimiento con los imputados que comenzaron el jueves pasado y se extenderán hasta mañana y a la scopométrica sobre una zapatilla con sangre que fue secuestrada en la casa que los acusados alquilaban en Villa Gesell.

La División de Operaciones Técnicas de la Policía Federal iniciará hoy en Mar del Plata el análisis de los 10 celulares de los acusados. La medida fue pedida por la fiscal Verónica Zamboni para obtener mensajes de texto y de WhatsApp, llamadas, correos electrónicos e información de las redes sociales que estén instaladas y abiertas en los teléfonos. Se busca saber si después del crimen de Fernando los imputados utilizaron los celulares para enviar algún mensaje sobre lo ocurrido.

Además se buscará determinar si hay mensajes que fueron borrados, algo que la actual tecnología permite saber y también recuperar. La primera tarea que tendrán los peritos es abrir los aparatos. Algunas marcas - principalmente Iphone-, y modelos no son sencillos de acceder.

Hay otro teléfono también que será peritado. Es el de Pablo Ventura, el joven a quienes los rugbiers acusaron de ser el dueño de la zapatilla ensangrentada que se halló en la casa. Ventura estuvo cuatro días preso y fue liberado cuando se determinó que no estaba en Villa Gesell cuando Báez Sosa fue asesinado. Ventura le entregó a la justicia la clave de su teléfono para que se pueda acceder.

La segunda pericia que comenzará hoy es a la ropa de los rugbiers. Estará a cargo de la Policía Científica de Dolores. En las prendas se buscarán pelos, manchas de sangre, rasgaduras y cualquier elemento que permita aportar información sobre el ataque a Fernando y sus amigos. Las fuentes consultadas señalaron que el resultado puede estar esta misma semana.

Además, la Policía de Tierra del Fuego continuará con la prueba de scopometría sobre uno de los 19 pares de zapatillas que fueron secuestradas en la casa de los rugbiers. Se trata de un calzado que tiene manchas de sangre en su punta y en uno de sus costados. La medida se pidió luego que la autopsia que se le hizo al cuerpo de Fernando reveló que tenía una huella o marca compatible con una zapatilla.

La zapatilla ensangrentada que se está analizando
La zapatilla ensangrentada que se está analizando

Por último hoy continuará en Villa Gesell la rueda de reconocimiento con los 10 acusados. Será la tercera jornada y mañana la última, luego de que se realizaron otras dos el jueves y viernes pasado. Los testigos de las rondas son los amigos de Fernando que estuvieron con él en Le Brique y algunos de los cuales también fueron atacados por los rugbiers.

Los acusados por el crimen son Lucas Pertossi (20 años) Matías Franco Benicelli (20), Ayrton Michael Viollaz (20), Máximo Pablo Thomsen (20), Luciano Pertossi (18), Alejo Milanesi (20), Tomás Enzo Comelli (19), Juan Pedro Guarino (19), Ciro Pertossi (19) y Blas Sinalli (18).

Ciro Pertossi y Thomsen están imputados de ser los autores de las patadas que mataron a Fernando cuando ya estaba tirado en el piso. A los otros ocho se los acusa de haber sido partícipes necesarios del crimen porque agredieron a los amigos de la víctima para impedirles que le presten auxilio. El delito por el que están detenidos es el de homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas que tiene una única pena, la prisión perpetua.

Los 10 rugbiers detenidos
Los 10 rugbiers detenidos

En las dos primeras ruedas de reconocimiento los testigos identificaron a siete de los acusados. El más comprometido es Thomsen: cinco testigos dijeron que le pegó patadas a Fernando cuando estaba en el piso. Comelli también fue señalado por dos personas como uno de los agresores de Fernando.

Por otra parte, Benicelli y Viollaz fueron identificados como quienes alentaban a agredir a la víctima y quienes evitaron que los amigos de Fernando se acerquen para ayudarlo. También como agresores de los amigos de Fernando fueron señalados Ciro y Luciano Pertossi. De los 10 rugbiers los únicos que por el momento no fueron identificados son Sinalli, Milanesi y Guarino.

Tampoco fue reconocido Ventura, quien sigue imputado y se estima que cuando termine la rueda será desvinculado definitivamente de la causa penal.

“Esta medida de reconocimiento por sí sola no dice nada. Su resultado sirve para complementar las filmaciones que hay en la causa y las declaraciones de los testigos del hecho”, explicó ante Infobae una fuente judicial.

Los reclamos de justicia por el crimen de Fernando (Nicolás Stulberg)
Los reclamos de justicia por el crimen de Fernando (Nicolás Stulberg)

Los 10 acusados están alojados en la comisaría 1 de Pinamar y se espera que mañana, cuando finalice la medida de reconocimiento, sean trasladados al penal de Dolores.

Báez Sosa, su novia y sus amigos fueron a bailar el sábado 18 a Le Brique. En el boliche tuvieron un altercado con los rubgiers durante el recital del trapero Neo Pistea. Los rugbiers y Fernando fueron sacados del lugar a las 4:40 de la mañana. Fernando se fue a comprar un helado. “Che, nos están pegando”, avisó un amigo de la víctima al resto de los chicos con un mensaje de WhatsApp.

“Al toque de atrás vino todo una banda dándole piñas a casi todos, fueron directamente a pegarnos”, contó en la causa un amigo de Fernando, quien en el piso fue rematado a patadas. Le hicieron RCP y una ambulancia lo trasladó a un hospital donde falleció.

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