Mientras continúa la conmoción por la muerte de Fernando Báez Sosa -asesinado a patadas por diez rugbiers- y aumenta la preocupación por los reiterados casos de violencia sucedidos en las ciudades balnearias bonaerenses, el salvajismo se trasladó a la provincia de Tucumán. Allí, un grupo de jóvenes protagonizaron un feroz enfrentamiento, que incluyó machetazos, piedras, palos y un auto embistiendo a un cuatriciclo.
El hecho ocurrió en la localidad de Tafí Viejo el pasado domingo, cuando dos personas que estaban a bordo de un auto se enfrentaron con el conductor de un cuatriciclo en el ingreso a una estación de GNC, ubicada en la intersección de Perú y Tucumán de dicha ciudad. Según informó La Gaceta, los motivos que desencadenaron el salvaje momento tendrían origen en viejos enfrentamientos entre ellos.
Un video que circula en redes sociales muestra cómo uno de los involucrados porta un machete, mientras los otros contraatacan con palos y piedras. Al quedarse sin proyectiles, uno de ellos se sube a su vehículo para defenderse de los ataques del conductor del cuatriciclo que comenzó a golpear el frente y el parabrisas del auto. Ante esta situación, el automovilista intentó atropellar al agresor y terminó embistiendo al cuatriciclo, que luego rompería a palazos. Insólitamente, solo se registraron daños materiales.
Pese a que luego se sumaron más personas, la Policía llegó al lugar y detuvo apenas a los dos principales involucrados, que fueron identificados como Iván Palomino (sería el conductor del Chevrolet negro) y Eduardo Moya (dueño del cuatriciclo), el portador del machete. Si bien una primera versión sostenía que fue un intento de robo, según la declaración de los mismos ante la Justicia, la trifulca se desató por una vieja rivalidad que existe entre ambos. Al encontrarse en la estación de servicio, comenzaron a agredirse verbalmente hasta que la discusión culminó con la salvaje escena.
Mónica Gómez, empleada de un bar de la zona, sostuvo: “Por lo que vimos, el hombre del cuatriciclo se defendió de un ataque”. Mientras que uno de los playeros de la estación de GNC indicó que “parecían borrachos” y que “al menos uno de ellos es una persona peligrosa”. Sin embargo, fuentes policiales aseguraron que ninguno tenía antecedentes penales. Desde la fuerza de seguridad indicaron que el hombre que cargaba el machete lo hacía porque trabaja en campos de la zona y, al verse superado en la pelea, decidió utilizar la herramienta para defenderse.
Los vehículos fueron secuestrados por la Policía de Tafí Viejo para realizar las pericias correspondientes. Luego de la declaración de los implicados, la Justicia determinó medidas cautelares y libró órdenes perimetrales para ambos jóvenes. La causa quedó a cargo del fiscal Ignacio López Bustos.
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