Crimen de los rugbiers: “La intención de los agresores era matar a Fernando Báez Sosa”

El fiscal general de Dolores, Diego Escoda, consideró que la violencia que ejercieron quienes golpearon a la víctima refleja que “hubo un dolo homicida”. Además señaló que al momento de la detención no había signos de que estuvieran bajo los efectos del alcohol

Guardar
Fernándo Báez Sosa, la víctima del crimen en Villa Gesell
Fernándo Báez Sosa, la víctima del crimen en Villa Gesell

Se complica la situación de los rugbiers imputados por el asesinato de Fernando Báez Sosa, tanto de los dos señalados como coautores como de los 8 implicados como partícipes necesarios.

El fiscal general de Dolores, Diego Escoda, consideró esta mañana que según su análisis, “la intención de los agresores era matar a Fernando” y que eso queda en evidencia por la violencia con la que golpearon a la víctima y la forma en la que actuaron, impidiendo incluso que fuera asistido por sus amigos. Además, Escoda señaló en declaraciones a radio La Red que al momento de ser detenidos, horas después del hecho, los rugbiers no estaban alcoholizados.

El funcionario judicial también adelantó que se llevará a cabo una prueba para tratar de determinar quién aplicó el golpe mortal: “Se va a realizar una pericia scopométrica, que es el cotejo entre el dibujo de la zapatilla y una impronta que hay en el rostro de la víctima para ver si coincide con el calzado", explicó en diálogo con TN.

Dos de los 10 detenidos están señalados como coautores del homicidio y los 8 restantes como partícipes necesarios (Christian Heit)
Dos de los 10 detenidos están señalados como coautores del homicidio y los 8 restantes como partícipes necesarios (Christian Heit)

La calificación que hasta el momento tiene la causa, tanto para los dos imputados como coautores como para los jóvenes acusados de partícipes necesarios es "homicidio agravado por concurso premeditado de dos o más personas y alevosía”.

“Es decir, lo que sostiene la fiscalía, y al menos hasta ahora comparte el juzgado, es que ellos salen con la intención de dar muerte, predestinados a golpearlo hasta este resultado. Y la alevosía se da porque los golpes se dan cuando la víctima estaba de espaldas y con la superioridad numérica entendemos que actuaron sobre seguro”, explicó. "Hay una persona desvanecida que se la sigue golpeando, hay un dolo directo. Luego será un tribunal criminal quien decida”.

“Lo que se le imputa a los partícipes necesarios es no haberlo impedido”, señaló e indicó que la pena que les corresponde es la misma: prisión perpetua. “Nuestro Código Penal no distingue entre autores y partícipes necesarios”, explicó el abogado Christian Poletti, especialista en derecho penal.

Según pudo saber Infobae, la Justicia ordenó que sean abiertos y peritados los teléfonos celulares de los 11 acusados para determinar si hay mensajes sobre el homicidio ocurrido la madrugada del sábado pasado en la puerta del boliche Le Brique de Villa Gesell. También determinar si hay mensajes borrados. La pericia, que fue pedida por la fiscal Verónica Zamboni y ordenada por el juez de Garantías David Mancinelli, se realizará en una dependencia de Mar del Plata.

La Justicia peritará los teléfonos celulares de los acusados y analizará el ADN en la ropa y zapatillas secuestradas
La Justicia peritará los teléfonos celulares de los acusados y analizará el ADN en la ropa y zapatillas secuestradas

También se llevarán a cabo a partir de la semana que viene pericias de ADN sobre la ropa y zapatillas secuestradas en la casa donde se hospedaban los acusados en Villa Gesell y a partir de mañana comenzará la rueda de reconocimiento. Los 10 rugbiers serán expuestos ante testigos del hecho y seis amigos de Fernando, que deberán identificar a quienes patearon hasta la muerte al joven de 18 años y señalar el rol de cada uno en la golpiza mortal.

De esa rueda de reconocimiento también participará Pablo Ventura, el detenido número 11. Ventura, un remero de 21 años, fue liberado ayer por la noche, tras cuatro días detenido, tras ser involucrado por los otros acusados en lo que se supone fue una suerte de “chiste” interno, y una vecina de la casa donde se hospedaban.

“Yo sinceramente creo que estos chicos no sabían que se había muerto el otro joven. Por eso tiraron Pablo Ventura, yo creo que lo tiraron como una broma. Ni siquiera creo que sea una malicia. Lo han dicho como una joda más, pensarían que el chico no estaba muerto. Hoy un amigo de los chicos estos me dijo que cada vez que ellos hacían alguna picardía decían: ‘¿Quién lo hizo? Pablo Ventura’”, dijo José María, padre de Pablo, ayer a la noche cuando el joven fue liberado.

SEGUÍ LEYENDO:

Guardar