El reloj de las cámaras de seguridad del restaurante “La Querencia” en la zona de la costanera de Zárate marca las 21:09 del viernes 17 de enero. Las imágenes muestran a tres personas ingresando al lugar. Serían Pablo Ventura, su papá José María, y su mamá. Al igual que su padre, el joven remero de 21 años viste una remera y unas bermudas. La familia camina por el salón y se ubica en una mesa al costado del ventanal.
Seis horas después, Fernando Báez Sosa era golpeado hasta el borde de la muerte frente a la disco Le Brique en Villa Gesell por un grupo de once jóvenes. Entre ellos, según la Justicia, estaba Pablo Ventura, junto a otros diez rugbiers del club Zárate. Al día siguiente del ataque, la DDI de Gesell arrestaba a Ventura en su casa.
El video –publicado por el sitio Enlace Crítico– se convierte en una pieza clave para el planteo de la defensa a cargo del abogado Jorge Santoro y fue presentado como prueba esta mañana en la UFI Nº 6 de Gesell. Ventura, según su abogado, fue indagado esta mañana: su defendido colaboró con la fiscal Verónica Zamboni y entregó su teléfono celular. Ventura, el detenido número once del caso, es investigado como “partícipe necesario” en la causa bajo la calificación de “homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas”.
Además del video en el restaurante, la defensa de Ventura presentó cuatro testigos, el video de una cámara de seguridad y su teléfono para que sea peritado. A eso se agregan el informe médico que fue sumado al expediente, que indica que en su cuerpo el joven remero de 21 años no presenta marcas en las manos, ni otros signos que indiquen que participó de una pelea. Para Jorge Santoro, el abogado del remero de 21 años, el peritaje al celular de su representado es clave. "Si estuvo en Villa Gesell o en Zárate tuvo que haber hecho algún llamado”, explicó a Infobae.
Esta mañana, Pablo Ventura declaró ante la fiscal Verónica Zamboni en la Fiscalía N° 6 de Villa Gesell. Su padre sostuvo que Pablo nunca salió de Zárate ni estuvo en Villa Gesell. “El viernes a la noche comimos en un conocido local de la costanera de Zárate y nos fuimos cerca de las 23 horas", sostuvo su padre, y las imágenes de las cámaras de seguridad avalan su testimonio. ¿Qué hicieron después de cenar? Según el hombre, su hijo estuvo con unos amigos y amigas en un departamento en Zárate. La novedad: su abogado aseguró que el grupo de chicos con el que el joven se juntó esa noche quiere declarar.
Mientras tanto, Pablo Ventura seguirá detenido hasta que los fiscales del caso terminen de examinar las pruebas. Según sus estimaciones, y si no hay material en su contra, en el transcurso de esta semana debería dejarlo en libertad. Se espera que también se le extraiga sangre al joven remero para cotejarla con las manchas hemáticas en la ropa secuestrada a los rugbiers y en la ropa de la víctima.
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