El viernes pasado cerca de las 11 de la mañana, casi 24 horas antes de que un grupo integrado por argentinos y venezolanos robara y matara en la puerta del hotel Faena en Puerto Madero al empresario inglés Matthew Gibbard, la Policía de la Ciudad detuvo a M.A, de nacionalidad venezolana, 29 años. Lo acusaron de robarle a un turista británico que recién había llegado al país desde el aeropuerto de Ezeiza. Ocurrió en la esquina de Villanueva y Teodoro García, barrio de Palermo.
El turista estaba a bordo de un remise, acompañado de una mujer de nacionalidad argentina. M.A, supuestamente, lo abordó en una esquina, con el auto en marcha. Extrajo un arma, lo obligó a que entregue su reloj Rolex modelo Daytona y su iPhone. El turista se negó: el ladrón lo atacó a golpes de culata y recibió heridas menores en la cara. Tras robarle, se fugó.
No pudo llegar lejos: otro hombre a bordo de una moto lo detuvo con un golpe de casco y lo derribó. Así, fue retenido por este hombre y el propio turista hasta que llegó la Policía porteña.
El caso quedó en manos del Juzgado Nº31 del doctor Alfredo Godoy, con una calificación de robo. Sin embargo, los cotejos de información posteriores revelaron una sorpresa: M.A ingresó al país el 6 de diciembre pasado. Lo hizo legalmente a través de un paso de Migraciones junto a otro venezolano, A.R, que tiene antecedentes penales en su país.
A.R hoy está imputado en la causa por el asesinato de Gibbard: fue vinculado al Ford Fiesta Rojo que siguió al empresario desde el penal de Ezeiza. Es su titular, se hizo de la titularidad del auto, según fuentes cercanas al caso, con un documento provisorio.
El nombre de A.R figura en la carátula del expediente por el robo y homicidio de Gibbard que investiga la Policía de la Ciudad bajo las ordenes de la jueza de instrucción Yamile Bernan. Está imputado junto a otros tres argentinos ligados a los vehículos usados en el ataque, en especial uno de ellos que está acusado de ser el proveedor de autos y motos de la banda.
Hay varios prófugos en el expediente, entre ellos A.R. Hoy por la mañana, el secretario de Seguridad porteño Mauricio D’Alessandro aseguró que el tirador que le quitó la vida al empresario fue identificado, aunque continúa prófugo. Los investigadores pudieron establecer que la banda operaba hace al menos dos meses, con asaltos de marcada violencia a sus víctimas. El 12 de noviembre pasado, dos ladrones atacaron a un ejecutivo de una multinacional en la entrada del hotel Intercontinental. El ejecutivo, un canadiense de 46 años, recién había llegado de Ezeiza. Lo arrebataron para quitarle un bolso Louis Vuitton con su laptop y un cargador. La banda, según investigadores, marcaba a sus víctimas en el sector de arribos del aeropuerto para luego seguirlos.
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