Clan Benítez: condenaron a 48 años de prisión al mayor de los hermanos por torturar y violar a sus ex novias

Fernando fue encontrado culpable por los delitos de “tentativa de femicidio agravada, abuso sexual con acceso carnal reiterado, suministro de estupefacientes y privación ilegal de la libertad” de dos mujeres en Bahía Blanca. Su hermano Gonzalo y su madre Nélida recibieron 13 años de cárcel por ser considerados “partícipes necesarios” del horror

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Gonzalo y Fernando Benítez junto a su madre Nélida Llanos
Gonzalo y Fernando Benítez junto a su madre Nélida Llanos

El Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Bahía Blanca condenó a la pena de 48 años de prisión a Fernando Rubén Benítez, de 27 años, por haber secuestrado, torturado, abusado y humillado durante varios días a dos mujeres que fueron sus parejas en su casa de la calle Güemes al 3700 en el Barrio Latino de esa ciudad. Su hermano y su mamá fueron condenados a 13 años de cárcel por ser “partícipes necesarios” de esos delitos.

El llamado “Clan Benítez” fue descubierto en marzo del año pasado cuando Aldana García (19), una de las víctimas, logró escapar de “la casa del horror” y alertar a su familia de lo que había vivido ahí. Cuando la policía se dirigió al lugar, los efectivos encontraron en el fondo también a otra mujer, Andrea Santa Cruz (23), desvanecida. Ambas jóvenes, que habían sido parejas de Fernando, debieron ser internadas de urgencia en la terapia intensiva del Hospital Interzonal de Agudos José Penna.

Fernando Benítez fue condenado a 48 años de prisión (Gentileza La Ciudad)
Fernando Benítez fue condenado a 48 años de prisión (Gentileza La Ciudad)

Fernando, el único que llegó al juicio detenido en la Unidad Penitenciaria IV Villa Floresta de Bahía Blanca fue encontrado culpable por los delitos de “tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género, abuso sexual con acceso carnal reiterado, suministro de estupefacientes a título gratuito y privación ilegal de la libertad agravada”.

Su hermano Gonzalo Leonardo Benítez (26) y la madre de ambos, Nélida Esther Llanos (67), ambos excarcelados tras la primera detención fueron encontrados culpables de ser “partícipes necesarios” de esos delitos.

La fiscal Marina Lara, de la UFI N°14 de Bahía Blanca especializada en Delitos Sexuales, había pedido 50 años de cárcel para Fernando y 11 años y seis meses de cárcel, como también su detención inmediata, para Llanos y Gonzalo. Sin embargo, hasta que el fallo no queda firme, el tribunal resolvió que la madre y el hermano de Fernando continúen en libertad.

La entrada de la casa de los Benítez en la calle Güemes
La entrada de la casa de los Benítez en la calle Güemes

La defensa del líder del mayor de los Benítez había solicitado que no se le aplicara una pena superior a 25 años de prisión y que se considere como atenuante que era consumidor de drogas. Los defensores oficiales Sebastián Cuevas, en representación de Nélida Esther Llanos, y su par Carlos Carnevale, quien patrocina a Gonzalo, solicitaron la absolución de ambos al considerar que tanto la madre como el hermano “tenían temor de Fernando”.

“Claramente hay una dinámica familiar enferma pero ellos se negaron sistemáticamente a realizarse las pericias psicológicas. Entonces no podemos saber por qué actuaban así o si efectivamente le tenían miedo”, dijo a Infobae Gustavo Avellaneda abogado querellante de una de las víctimas.

En esa casa pequeña había un comedor, una cocina, un baño, tres habitaciones y un gran patio. La policía la registró y encontró colchones con sangre, cables, candados y, en el dormitorio del hermano mayor, además de la ropa y pertenencias de las víctimas, destornilladores, cuchillos y tijeras. Una pericia perimetral comprobó que por el tamaño de la vivienda sería difícil que Gonzalo y Nélida no supieran lo que ocurría.

Los hermanos Benítez, con los perros que agredieron a las jóvenes
Los hermanos Benítez, con los perros que agredieron a las jóvenes

Andrea, al igual que Aldana, había conocido a Fernando por Facebook y al poco tiempo se había mudado con él. Tuvieron una relación conflictiva y violenta durante un tiempo, por lo que Andrea decidió irse, pero algunos meses después volvió a la casa de Güemes a buscar ropa que había olvidado y se encontró a su ex pareja conviviendo con García. Sin embargo, una vez que entró en esa casa no volvió a salir e inició una oscura triple convivencia de las dos jóvenes con los Benítez.

Para la fiscal Marina Lara aproximadamente desde febrero y hasta el 26 de marzo del 2018, que se produjeron las detenciones, ambas fueron retenidas contra su voluntad. Allí, Benítez las agredió físicamente mediante golpes de puño las cortó con vidrios, las torturó con un destornillador, las obligó a tomar cocaína, las expuso a mordeduras de sus perros y hasta abusó sexualmente de ellas.

El perito psicológico Jorge Rabadán de la Asesoría Pericial, que evaluó a las dos mujeres, consideró que ambas sufren a raíz de esto “un impacto traumático de una vivencia con sintomatología orgánica” y aseguró que su psiquis “estaba arrasada” y que “no hubo fabulación”. También dijo que al momento del análisis ambas chicas se presentaron como “novias” de Benítez y que “se culpaban entre sí”. También indicó que ambas tenían una “inmadurez afectiva” y que al menos en el caso de Aldana había una “imposibilidad consciente” de abandonar el lugar, más allá de que no estuviera encadenada.

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