La Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada de manera unipersonal por su presidente, Gustavo Hornos, resolvió un conflicto de competencia entre el Juzgado Federal 7, de Sebastián Casanello, y el Tribunal Oral Federal 5 en el marco de la causa “Martins”, en la que se investiga una maniobra de lavado de activos provenientes de la explotación de la prostitución que se le imputa a Raúl Martins, el ex espía que fue recientemente descubierto y detenido en México.
En este expediente el acusado es Mariano Julio Augusto Martins (35), el hijo de Raúl Martins, quien está acusado de ingresar en el mercado bienes no declarados que provenían de la explotación sexual de personas que se le imputa a su padre, por medio de operaciones bancarias y financiares y de la compraventa simulada de propiedades, de acuerdo a la acusación de la fiscal Paloma Ochoa.
Mariano Martins reside en España y fue indagado en la ciudad de Benidorm y luego procesado por el delito de lavado de activos. La fiscal Ochoa pidió la elevación de la causa a juicio, lo cual fue decretado por el juez Casanello. Con posterioridad a su procesamiento no pudo localizarse y “notificarse debidamente” a Martins en España y el Tribunal de Juicio declaró nula la elevación de la causa y la devolvió a la etapa de instrucción para que lo localice debidamente.
Ante el conflicto de competencia planteado por el juez de instrucción, intervinieron la Cámara de Casación y de manera unipersonal el juez Hornos, quien ordenó que vuelvan las actuaciones al Tribunal de juicio y que allí se procure la presencia del imputado. Explicó que la etapa de investigación fue superada y que la decisión de devolver la causa a esa etapa vulneraba los principios de preclusión y progresividad y retrotraía el proceso.
Por ello, con el objeto de asegurar una mejor y más pronta administración de justicia se devolvió el expediente al TOF 5 que deberá procurar la presencia de Martins en la Argentina para llevar a cabo su juicio por el delito de lavado de activos provenientes de la explotación sexual.
Raúl Martins, un ex agente de inteligencia de 70 años que está acusado de liderar una red de prostitución, fue detenido a comienzos de este mes de octubre en la ciudad mexicana de Cancún. Se había radicado en ese país hace más de 15 años y el 3 de septiembre último la Cámara Federal I confirmó el procesamiento y pedido de prisión preventiva solicitados por la jueza federal María Servini.
Su hija Lorena fue quien lo denunció. Ella lo acusó de regentear cabarets con supuesta protección policial en Buenos Aires, Mendoza y México. Existe la posibilidad de que Martins haya seguido regenteando sus negocios desde México con la ayuda de familiares y allegados. Según la denuncia, el ex espía llevaba mujeres engañadas y las obligaba a ejercer la prostitución.
La causa que pesa sobre Martins es una compleja investigación sobre prostitución, trata de personas y lavado de activos, que fue dividida en varios expedientes. Uno de ellos es el que tiene como acusado a su hijo Mariano.
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