Encontraron rastros de éxtasis en un bolso del ex jefe de la Policía Federal de Santa Fe baleado en Rosario

Una pericia determinó que Mariano Valdés habría llevado drogas encima el 9 de septiembre pasado, cuando denunció haber sido atacado a balazos en la autopista Buenos Aires-Rosario durante un confuso episodio

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El comisario Valdés, ex titular
El comisario Valdés, ex titular de la Delegación Santa Fe de la Policía Federal

Después de la aparición del video en el que se lo ve salir herido de su auto sin que hubiera existido un ataque exterior, como declaró él mismo en su momento, la situación judicial del comisario de la Policía Federal Mariano Valdés sumó un ingrediente de complicación grave a una causa que ya de por sí lo tiene comprometido. Una pericia ordenada por la Justicia sobre un bolso que el hombre llevaba la noche del 9 de septiembre, cuando ocurrió el presunto ataque, detectó rastros de metanfetaminas (éxtasis) y anfetaminas.

El análisis, llevado a cabo por personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) con la misma tecnología que se usa en los aeropuertos, determinó que en el bolso que usó el jefe de la Delegación Santa Fe de la Policía Federal la noche del ataque hubo en algún momento estas drogas. Lo mismo se descubrió en la ropa que usó ese día.

El bolso fue secuestrado por la Justicia el 20 de septiembre en la sede policial donde trabajaba Valdés. Es decir, 11 días después del hecho. Los investigadores sospechan que durante ese lapso de tiempo Valdés -o alguien de su entorno- sacó las sustancias del lugar. Este mismo examen se había realizado sobre el auto donde fue baleado el policía y había dado negativo.

“Valdés había dicho que en el bolso tenía ropa y objetos personales. En el allanamiento en la delegación Santa Fe el 20 de septiembre se secuestró ropa y el bolso que se buscaba. Se hizo la medida con testigos y se determinó en el bolso la existencia de metanfetamina y en uno de los pantalones, anfetamina. Estaríamos hablando de éxtasis, en un 99%”, comentó Natalia Benvenuto, coordinadora de Sedes de Fiscalía en el interior.

Ataque al jefe de policía de Santa Fe

Sin embargo, no se pudo determinar si había metanfetaminas en gran cantidad o era para consumo personal. “Entre el 9 y el 20 de septiembre pasó mucho tiempo, la máquina que usamos trabaja sobre residuales y al 20 de septiembre todavía había residuales”, aseguró Benvenuto.

La existencia de drogas era una de las hipótesis que se barajaban. Este descubrimiento le da un nuevo giro a la investigación, puesto que ahora el caso pasará a la Justicia Federal. “Entendíamos que no había elementos para sostener que la causa no era federal, pero hoy sí, con la medida que se realizó hoy”, dijo el fiscal de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos, Matias Edery.

Al momento del ataque el jefe de la Policía Federal en Santa Fe iba acompañado por la agente federal Roxana González (27), quien ahora está resguardada por el programa de protección de testigos. Al principio, tanto Valdés como su acompañante describieron que, mientras se encontraban dentro de un auto Ford Focus gris, fueron emboscados y atacados desde otro auto en la banquina del kilómetro 258 de la autopista, a la altura de la localidad de Fighiera.

Valdés dijo que se había detenido para cambiar la yerba del mate y justo en ese momento fueron baleados por integrantes de una camioneta de doble cabina, aparentemente negra. El relato de los policías marcaba que dos hombres encapuchados se asomaron por las ventanillas y les dispararon. Los policías dijeron haber respondido con sus armas reglamentarias y creyeron haber herido a uno de los “sicarios”.

El Ford Focus en el
El Ford Focus en el que se trasladaba el comisario

Pero las pericias revelaron que el relato era falso. Según se desprende de las imágenes tomadas por cámaras de seguridad, Valdés habló con sus agresores en una parada en Ramallo, antes del ataque. Los atacantes iban en una camioneta. El comisario recibió un tiro en la ingle y otro en el antebrazo derecho. Los disparos fueron a corta distancia y se cree que con su propia arma.

“Esa noche, el comisario se habría bajado y habría tenido un encuentro –atrás del auto y no al costado– con personas que conocía. Primero fue una charla y después una discusión que terminó con el enfrentamiento”, reveló el fiscal, quien casi descartó el "tema pasional” entre Valdés y Roxana González, quien sólo sería testigo.

Valdés está imputado y detenido. Otro implicado es su segundo en la cadena de mando, Higinio Bellagio, a quien se lo investiga por colaborar con sus superior. Se cree que alteró la escena del crimen y borró pruebas.

Bellagio se llevó el bolso en cuestión. Y dijo que en su interior había ropa, zapatos, yerba mate, un jugo y un perfume. Según las pericias, no había solo eso.

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