Este lunes por la mañana, el Tribunal Oral Nº24 celebrará en la sala de audiencias del edificio judicial de la calle Paraguay al 1500 el juicio contra Santiago Silvoso por el accidente que protagonizó en la madrugada del 5 de abril de 2015 en su Honda Civic, el choque frontal contra el Volkswagen gol blanco que tripulaba en el asiento de pasajero Macarena Mendizábal, de 21 años en ese entonces, estudiante de psicología en la UCA, que salía de bailar en la ex discoteca Mint en Costanera Norte.
La trompa del Civic de Silvoso, incrustada contra el costado izquierdo del Gol, quedó totalmente destruida. Silvoso fue trasladado al Pirovano, lo mismo el conductor del Gol, Ramiro Sala Giménez, a quien Macarena había conocido el verano anterior. Ninguno de los dos tuvo lesiones significativas. La suerte para Macarena fue peor. El choque le provocó una fuerte lesión cerebral. Enfrentó una neurocirugía, intentos en el FLENI de Escobar. Quedó en estado vegetativo. Sigue así hasta hoy.
Su familia tuvo que dejar el departamento en el que vivían, el lugar no alcanzaba para su internación domiciliaria. Se mudaron a un barrio cerrado en Moreno. Macarena a veces respira con la ayuda de un respirador artificial, a veces, no. Solía colaborar en un hogar de chicos de la zona de Florida. Trabó un vínculo especial con un chico, Javier, apenas un bebé de un año y medio. En su cama, en Moreno, Javier la visita hasta hoy.
Así, casi cinco años después, comienza el juicio en contra de Silvoso. La acusación en su contra: lesiones gravísimas culposas, confirman fuentes en el TOC Nº24.
Serán cinco audiencias, con alegatos de las partes programados para el 29 de octubre. El Tribunal será unipersonal, presidido por la jueza María Cecilia Maiza, con Ana Helena Díaz Cano como fiscal general acusadora. Roberto Schlagel, histórico abogado querellante de la causa, actuará en representación de la familia. Víctor Varone y Ana Laura Palmucci serán los defensores de Silvoso.
El acusado había tenido sus días en la pista. Registrado como empresario en la AFIP, Silvoso, hoy de cuarenta años, fue un corredor de autos, participó en ligas como la Fórmula Metropolitana, en autodromos como el Roberto Mouras de La Plata. Su auto tenía como principal sponsor a Dantilo SA, la firma de su familia dedicada a la producción de antideslizantes, de la cual es empleado hasta hoy.
Cerca de él dicen que no maneja desde el accidente. También aseguran que intentó lograr una probation con una oferta de dinero a la familia, luego un juicio abreviado con el máximo de la pena en suspenso, cuatro años de inhabilitación para conducir. No lo logró. "Nos opusimos al abreviado", asegura Schlagel. "Para nosotros hay dolo. La familia tiene derecho al juicio y a saber qué pasó". Los Mendizábal quieren un juicio a toda costa. Una condena en su contra dictada por la jueza Maiza podría llevar a Silvoso a la cárcel.
Las fotos de los autos tras el accidente, que ilustran esta nota, son elocuentes. El daño a ambos autos es extenso. Hay testigos presenciales, asegura el abogado querellante. También hay áreas grises. Sala Giménez, el conductor del Gol, fue sobreseído. Cerca de Silvoso dicen que por prescripción de la causa en su contra, el abogado Schlagel asegura que fue por falta de mérito. Ambos coinciden en que se negó a someterse a un test de alcoholemia tras el hecho en el hospital Pirovano. Declararía como testigo.
También existe en la causa otro papel, con el membrete de la vieja Comisaría Nº51 de la Federal, con fecha del día del accidente, que la querella atribuye a Silvoso, un alcotest que marca 1.46 gramos de alcohol por litro, el triple del permitido. La defensa presentará un testigo en el juicio, un eminente toxicólogo que explicará que ese resultado no habría sido producto de un consumo de alcohol, sino de un proceso en sus órganos producido por una patología que enfrentaba al momento del accidente.
La Justicia, por su parte, se tomó su tiempo. Silvoso nunca fue detenido. Pasó más de dos años sin siquiera ser indagado. La defensa, en sus cálculos, no descarta que Silvoso tome la palabra en el juicio.
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