A un año de ser condenada a perpetua, el motivo por el que Nahir Galarza decidió no ir al veredicto a último momento

Lunes 2 de julio de 2018. Nahir Galarza está decidida a ir (ser trasladada, en rigor) a la mañana siguiente hacia los tribunales de Gualeguaychú a escuchar el veredicto. Algo, quizá una falsa esperanza, le hace pensar que no será condenada a cadena perpetua. Y si esa fuera la pena, aun está dispuesta a enfrentar su destino. Pero a último momento decidió no asistir a la audiencia final. ¿Qué la hizo cambiar de opinión?

El 3 de julio, decenas de periodistas llenaron la sala y otros esperaron afuera. El Tribunal Oral presidido por el juez Mauricio Derudi decidió condenarla a prisión perpetua por el delito de homicidio agravado por el vínculo y el uso de arma de fuego. Nahir cumple condena en la cárcel de mujeres de Paraná por haber matado de dos balazos, con el arma reglamentaria de su padre policía, a Fernando Pastorizo. El crimen ocurrió el 29 de diciembre de 2017.

Justamente hoy, la Cámara de Casación Penal de Concordia -integrada por los jueces Silvina Gallo, Darío Perraud y Adolfo Lafourcade- realizará una audiencia en la que comenzará a definir si confirma o revoca esa condena.

Ni Nahir ni sus padres Marcelo Galarza y Yamina Kroh asistieron al último día del juicio, hace exactamente un año.

En su momento, Infobae reveló que Nahir decidió no ir a la lectura del veredicto en su contra por consejo de su abogado, Horacio Dargainz, a pesar de un dispositivo de seguridad con seis miembros de la Guardia Especial de la Policía local y una serie de vallas de contención. A Marcelo y a su esposa, Dargainz les aconsejó no ir tampoco. "Por temor a que los linchen, de hecho las veces que fueron les gritaron 'asesinos'", dijo una fuente.

Pero a todo eso se sumó otro detalle más: Nahir iba a ir pese a los consejos de sus padres y de su abogado. "No quiero esconderme", insistió. "Voy a ir, pase lo que pase", dejó en claro. "Tenía la esperanza de no recibir semejante pena, pero con el paso del tiempo comprobó que ya estaba condenada de antemano, por la Justicia y los medios", dijo un allegado a la joven que por entonces tenía 19 años.

"Si ella iba nosotros pensábamos ir, como ocurrió cuando declaró", dijo su padre a un allegado. ¿Por qué la joven que ahora tiene 20 años decidió no asistir a último momento? Con el correr de las horas del lunes, los padres de Nahir analizaron el consejo de Dargainz y en un zapping vespertino comprobaron la magnitud de la cobertura mediática que el veredicto tendría: cámaras de todos los medios, guardias, más de 500 personas esperando el cierre al caso.

"El colmo fue que los padres de Nahir se enteraron de que un canal había contratado a tres peritos, hasta uno balístico, para viajar al juicio cuando nunca lo cubrieron. Iban a hacer un circo de un drama. Y fue ahí que trataron de convencer a su hija de que no fuera: 'No te prestes a ese circo'. Ella quería ir de todos modos, pero la madre le escribió una carta en la que le pidió que no fuera por sus padres", reveló a Infobae un allegado a la familia Galarza.

"Al mismo tiempo les cayó la ficha de que se venía la perpetua, hasta ese día creían que iba a recibir una pena mucho menor", dijo la misma fuente.

El día de la condena, sus padres la siguieron por televisión. Infobae sorprendió a Galarza fumando un cigarrillo en el balcón de su casa. Nahir se enteró por radio. "Yo quería ir. Pero es cierto que por un lado iban a decir que si no iba, era no dar la cara. Pero si iba iban a decir que era tan caradura de ir y mostrarme pese a ser condenada. Nunca hubo matices", analizó Nahir.

El 17 de diciembre de 2018, en exclusiva, Infobae habló con Nahir Galarza. "Si no estuviera acá, estaría en un lugar peor", declaró.

—¿Tratás de borrar de tu cabeza lo que pasó el 29 de diciembre de 2017?

—(Tiene los ojos llorosos) Siempre voy a llevar el dolor toda mi vida. Me siento mal porque ese día que busco olvidar terminó muriendo una persona joven. Ese peso lo llevaré toda mi vida. Yo hice el duelo que tenía que hacer. Reviví todo, con todo me refiero del hecho para atrás y hasta ese día, lo que me acordaba, porque sinceramente había cosas que no me acuerdo. Declaré en el juicio porque lo tenía que hacer, dar una explicación, me pareció que tenía que desprenderme de todo eso. Además de asimilar todo lo que me estaba pasando ese día, que lo tuve que contar en el juicio, fue muy difícil. Los nervios de tener a la prensa detrás mío, gente desconocida que fue a presenciar el juicio, jueces, fiscales, abogados. Fue muy difícil porque no soy de contar mis cosas, no me gusta contar nada sobre mí en realidad, hacerlo delante de todos además de lo difícil y feo que fue lo que viví y pasó. Cuando terminé de declarar salí y fui a ver a mis padres, lloré lo que tenía que llorar y ya está, dije, nunca más me quiero acordar esto, y me desprendí, no quiero volver al pasado. No quiero estancarme ni quedarme en ese día horrible. Todo lo que debía decir de ese día lo dije en el juicio. No quiero volver a hablar de este tema, además no quiero ser malinterpretada. Ya fui juzgada y condenada.

Nahir siempre dijo que fue un accidente, que sufría violencia de género y que olvidó lo que ocurrió el día del crimen. Los jueces no le creyeron. A un año del homicidio, intenta mirar hacia adelante. Estudia Psicología, escribe poemas y sueña con que la condena se reduzca algún día.

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