Un hombre de 46 años, su hijo de 21 y dos cómplices fueron detenidos por la policía de la provincia de Buenos Aires acusados de integrar una banda delictiva que robó al menos cuatro comercios en los últimos dos meses en la zona Oeste del conurbano bonaerense.
Después de un puñado de robos similares en comercios de la localidad de Morón en un lapso de 60 días, y tras una serie de tareas investigativas, efectivos de la comisarías N° 1 y N° 2 de esa localidad detuvieron a los cuatro hombres que habrían sido los autores de los asaltos.
Las cámaras de seguridad de un frigorífico y una fiambrería que registraron el momento del robo fueron clave para identificarlos.
La banda era presuntamente liderada por José Roberto Donnantuoni, un mecánico oriundo de Morón, y su hijo, también llamado José Roberto, junto a Elías Nicolás Sentin Quintana, de 22 años, y otro hombre de 26, Federico Ezequiel Weingart, quien tenía un pedido de captura activo por otro robo en la ciudad de Dolores que databa de 2015.
En los dos asaltos que quedaron registrados -en los últimos días de marzo y los primeros de abril- la banda apuntó principalmente a llevarse la recaudación de la caja registradora y celulares.
"Debido a las imágenes de las cámaras de seguridad y el aporte de las víctimas pudimos verificar que los detenidos habrían cometido al menos cuatro hechos, pero no descartamos que puedan sumarse más casos", señaló uno de los investigadores, y aseguró que se presume que "tanto el padre como el hijo eran los cabecillas de esta organización".
"Aún se están estableciendo los roles de cada uno de ellos en la banda", agregó. La causa quedó en manos de la UFI N° 7 de Morón.
No es la primera caída para José Roberto, el padre: ya había estado preso en 2012 en un penal federal. Según fuentes cercanas a la investigación, en 1996 tuvo una causa por drogas, dos años después otra por un hurto de un auto. Volvería a caer en 2002 por el robo de un vehículo. Elías Sentín, por su parte, tiene antecedentes por robo a mano armada que datan de 2014 y 2015.
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