En la localidad tucumana de Río Seco, durante la madrugada del viernes último, un adolescente murió y otros tres resultaron gravemente heridos luego que un automovilista los atropellara sobre la ruta 38 cuando volvían de participar de una fiesta en la zona y caminaban por la banquina. Tras el hecho, el conductor se quitó la vida de un disparo en la cabeza.
Cerca de las 6 del viernes, Gonzalo Saracho (16) Lourdes María Roldán (17), Sofía Tamara Herrera (16) y Elín Gabriel Artaza (20) caminaban de regreso a sus hogares tras haber asistido a una fiesta en las cercanías del lugar.
A pocos metros de una estación de servicio YPF ubicada en la entrada de la ciudad, una Volkswagen Suran fuera de control conducida por Enrique Adolfo Mentz, un hombre de 40 años que vivía en Monteros, los atropelló desde atrás.
Tres de los jóvenes quedaron tendidos sobre la banquina, gravemente heridos. El cuarto, Saracho, murió en el acto: el capot del auto lo arrastró por al menos 100 metros.
Un vecino y testigo de la escena relató a la Gaceta de Tucumán que, tras embestirlos, el vehículo continuó la marcha con el cuerpo encima del capot y que cayó más adelante. Y detalló que si bien pudo ver cómo el conductor se retiró del lugar, al rato regresó.
Según informó la Policía, fue en ese momento que, al contemplar lo que había ocurrido, Mentz se mató de un disparo en la cabeza.
Los tres heridos fueron trasladados al hospital de Concepción. Luego uno de ellos, Roldán, fue derivada al hospital Padilla de la capital tucumana porque se encontraba en un estado más delicado.
En el hecho intervino la Fiscalía de Instrucción II del Centro Judicial de Monteros.
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