En Rosario, las imágenes de una cámara de seguridad ubicada en una pizzería exhibieron los segundos previos al desenlace fatal. Gastón Dlugovitzky, de 21 años, fue acusado por homicidio culposo tras impactar con su Ford Focus a un utilitario conducido por un hombre de 45 años, quien falleció al instante.
El impacto ocurrió en la intersección de San Martín y Garibaldi. En el video, se ve como Dlugovitzky conducía a gran velocidad. Debajo de la imagen, dos hombres que escucharon la colisión salieron corriendo hacia la otra esquina, en donde la Renault Kangoo de la víctima quedó cruzada sobre la calle.
El hecho ocurrió el miércoles cerca de la medianoche y las imágenes comenzaron a viralizarse durante la noche del jueves. El joven, quien también fue asistido por una ambulancia aunque está fuera de peligro, publicaba videos en su cuenta de Facebook en donde se filmaba conduciendo a gran velocidad.
Allí, en modo selfie, se exhibía manejando con un solo brazo y mirando la cámara: "Estamos acá con la cupé. Como siempre fiel mi cupé, les voy a mostrar de lo que es capaz. Vamos a sacarla a los piques. ¡Uy qué bien que me veo con la cupé! Acá está la 'cupesita' Vamos a sacarla a la pista".
Luego ingresa al Ford Escort y acelera el vehículo, lo saca arando y comienza a filmarse, dividiendo la mirada entre el camino que estaba transitando a gran velocidad y el celular. "Vamos a 160, 180 (km/h) por San Martín", dice.
La víctima fue identificada como Fabrizio Cragniolo. Se supo que manejaba por la calle Garibaldi y fue embestido por Dlugovitzky. Cragniolo sufrió diversos politraumatismos y falleció en el lugar.
Cragniolo se encontraba supervisando los caminos de recolección de residuos. Era padre de tres hijos y se desempeñaba como tesorero de la comuna de Ibarlucea, una pequeña localidad ubicada al noroeste de Rosario.
La fiscal Valeria Piazza de la Unidad de Homicidios Culposos ordenó el relevamiento de cámaras, pericias fotográficas y planimetría. También comenzó a recolectar los testimonios de los comerciantes y vecinos que observaron el siniestro, a pesar de que ya era muy tarde.
Dlugovitzky también sufrió varios golpes pero resultó ileso. Fue derivado al hospital, en donde se le realizaron exámenes de alcoholemia. No llevaba alcohol en sangre. Luego quedó en libertad, aunque imputado en una causa penal por homicidio culposo.