La ciudad de Rosario se ve cada vez más amenazada por la violencia narco. Cuando no son balaceras de amedrentamiento, se trata de un homicidio o algún otro ajuste de cuentas. Así, el último caso fue el de los asesinatos de Eduardo Cisneros (70 años) y su esposa Gloria Elba Larrea, quienes fueron acribillados mientras tomaban mate en una vereda. El hombre, un policía retirado, era el suegro de Luis "Pollo" Bassi, capo narco y enfrentado desde hace años con la cúpula del grupo Los Monos.
El doble homicidio se llevó a cabo en la calle Isola al 300 bis, justo enfrente del edificio del Fonavi donde residía la pareja. De acuerdo a testigos, los tiros fueron efectuados desde un auto Chevrolet Corsa gris y no se pudo identificar cuántos atacantes viajaban en el vehículo.
El doble crimen se produjo el sábado por la tarde. Cisneros había trabajado sus últimos años en la Sección Dactiloscopía, en la Policía de Santa Fe. Según los vecinos, la pareja no había tenido problemas con nadie, eran simples, y vivían para recibir a sus hijos y nietos y disfrutar de sus familias.
De acuerdo a medios locales, en la escena del crimen se encontraron al menos 13 vainas de cartuchos calibre .9 mm. En tanto, el ataque fue tan repentino que las víctimas casi no tuvieron tiempo de advertirlo. Cisneros quedó sentado en su silla sin vida, después de haber recibido los disparos.
Al parecer, una hija de Quinteros es la nueva novia de Luis "Pollo" Bassi, otro temerario líder narco, que se encuentra detenido en la cárcel de Coronda por el crimen de Juan Pablo Colasso, en 2012.
Los asesinatos, a su vez, golpearon una vez más a la familia de ese capo del narcotráfico, quien fuera acusado por Los Monos de haber matado a su líder, Claudio "Pájaro" Cantero, en mayo de 2013.
A raíz del crimen de Cantero, se desató una brutal guerra entre ambos clanes en la ciudad de Rosario. Así, el "Pollo" Bassi sufrió el asesinato de muchos de sus familiares. Entre diciembre de 2013 y octubre de 2014 fueron asesinados su padre, Luis, y dos de sus hermanos, Maximiliano y Leonardo. Todos los crímenes se cometieron en la remisería Cinco Estrellas, de Gobernador Gálvez.
Como si fuera poco, a lo largo del último fin de semana se produjeron cinco homicidios con sello narco en la ciudad. El viernes fueron asesinados Emilse Sosa, de 16 años, y Miguel Angel Quintana, de 50, durante una balacera contra una casa. A su vez, el sábado unos sicarios acribillaron a Matías Leonel Gobernatore, de 18 años, en una zona que estuvo comandada por Los Monos, en el barrio Las Flores.
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