La mujer cayó a metros de la Catedral de Bariloche. Tenía la cabeza ensangrentada con una herida profunda y yacía junto a su bicicleta, que había quedado tirada en el suelo a unos pocos metros. La gente que pasaba por el lugar pensó que se había tratado de un accidente vial. Sin embargo, lo que había sucedido a las cuatro de la tarde y a plena luz del día había sido un nuevo femicidio. Valeria Coppa moriría a las pocas horas en un hospital de la zona debido a un disparo en la cabeza.
El principal sospechoso por el crimen es la ex pareja de Coppa, llamado Mariano Cordi, quien se encuentra prófugo y hoy es buscado por gran parte de la Policía de la ciudad patagónica.
La víctima, madre de dos menores de edad, se desempeñaba como enfermera especializada en salud mental en la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENNAF) en la ciudad rionegrina.
Según informaron los medios locales, en un principio la mayoría de los testigos no escucharon el disparo y pensaron que la mujer había sufrido un grave accidente con su bicicleta en la vereda, a pocos metros de la calle Vicealmirante O'Connor.
Sin embargo, una vez que los médicos acudieron al lugar en una ambulancia, comprobaron que Coppa presentaba una herida de bala en su cabeza. La mujer fue derivada al Hospital Zonal Ramón Carrillo, donde perdió la vida cerca de la medianoche.
Una vez enterados de la noticia, familiares y amigos de la víctima y diferentes organizaciones sociales programaron una marcha para hoy a las seis de la tarde, desde la esquina de las calles Onelli y Brown hacia el Centro Cívico.
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