Rodrigo Eguillor, el joven acusado de abuso sexual en un departamento de San Telmo, detenido por resistencia a la autoridad y luego liberado, desafió a sus denunciantes tras salir de la Alcaidía Departamental Roberto Pettinato en La Plata con una liberación firmada por el Juzgado de Garantías Nº2 de Lomas de Zamora, la misma jurisdicción donde trabaja su madre, la fiscal de ejecución penal Paula Martínez Castro. "No hay pruebas", aseguró.
Mientras tanto, un giro de la trama se pone en marcha en los tribunales porteños. El 13 de noviembre, tres días antes del presunto ataque en el balcón de la calle Piedras, Eguillor hizo una denuncia por abuso sexual según confirmaron fuentes judiciales a Infobae. La persona a la que acusa es una joven de su misma edad.
La denuncia llegó al Juzgado Nº37 de la doctora Silvia Ramond, que delegó su instrucción en la Fiscalía Nº11. La causa –de la que no se conocen sus pormenores– continúa en trámite luego de que Eguillor ratificara la denuncia en el Juzgado; la Fiscalía, sita en la calle Paraguay, le hizo un pedido de información al joven, que hasta el momento no se presentó ante los investigadores. La acusada todavía no fue indagada.
Esta no fue la única acusación que el joven formalizó este año: también denunció por coacción a su propio padre, un empresario de 54 con domicilio en Ezeiza, registrado en el rubro de juegos de azar. El expediente, que comenzó en el Juzgado Nº7, fue delegado en la Fiscalía Nº30. "Está en trámite", afirma una fuente dentro de la causa.
En su conferencia de prensa improvisada, al salir de la Alcaidía, Eguillor señaló a los medios por "armar un circo" luego de que él mismo diera varias entrevistas en la tarde del martes en el hall de Ezeiza y dijo estar "arrepentido" de sus vivos en Instagram. "Yo soy inocente, pido disculpas por el video si ofendí a alguien", lamentó.
El joven quedó en el centro de la escena días atrás por varias denuncias por violencia de género que se viralizaron en las redes sociales. Poco después, se supo de sus antecedentes penales: en una de las causas quedó detenido por grooming a pedido de la fiscal Verónica Pérez, de la UFI 3 de Esteban Echeverría. "Llegó muy asustado no sabiendo dónde se encontraba, pero se lo tranquilizó", comentaron los investigadores sobre su estadía en la cárcel.
La causa más resonante de Eguillor es la que tramita el Juzgado Nº 48 de Alicia Iermini, donde está imputado por los delitos de privación ilegal de la libertad, violación y daños. Es el expediente vinculado al video en el que se lo ve forcejeando en el balcón de un departamento en San Telmo con una joven de 22 años.
Sobre esa prueba, hizo un descargo de tinte misógino y clasista que generó reacciones de repudio, al calificar a la denunciante de ser una "negra de mierda" que le "quiso sacar plata".
"Soy un pibe de bien, yo la salvé cuando se quiso suicidar y siempre estuve a derecho", aseguró Eguillor en el episodio que tuvo en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. La chica, en cambio, dijo que la escena en la casa ubicada entre la avenida Independencia y Piedras se produjo porque estaba intentando escapar tras haber sido abusada.