Alberto Walter Brauton Steimbach hoy tiene 46 años. De nacionalidad argentina, contador público, recaía sobre él una orden de captura internacional por haberse fugado el 17 de agosto de 2013 mientras cumplía con una visita extraordinaria en Merlo. Se cree que Brauton Steimbach, quien acaba de ser detenido en Bolivia por Interpol tras una gestión del Comando de Recaptura de Evadidos (CUFRE) de la Secretaría de Seguridad de la Nación, drogó al policía que lo custodiaba colocando un somnífero dentro de una empanada.
En 2011, sin haber cumplido ni siquiera con el 10% de la condena por las al menos 9 violaciones que había cometido, Brauton Steimbach gozaba de un permiso extraordinario para salir de la Unidad Penal 39 de Ituzaingó en la que estaba alojado para ir a visitar una vez por mes a su mamá enferma. Ese beneficio fue el que utilizó para llevar a cabo su plan, el que le permitió evadirse y mantenerse cinco años prófugo de la Justicia. Hasta este miércoles.
Una comisión integrada por personal de Interpol Argentina en cooperación con personal de Inteligencia de Bolivia y el CUFRE lograron en las últimas horas la detención del prófugo. El ahora detenido enfrenta una condena de 40 años de prisión. Ahora las autoridades bolivianas, según informaron fuentes se seguridad, evalúan por qué vía trasladarlo hacia la frontera con Argentina para realizar la entrega formal.
El modus operandi de las violaciones
Brauton Steimbach interceptaba en la calle a sus víctimas, las amenazaba con un arma y las llevaba con su auto a algún descampado. En total, se presentaron a declarar en el juicio contra el contador público 9 personas que dijeron haber sido víctimas de sus abusos, en tanto que se calcula que fueron al menos cuatro personas más las que también sufrieron sus ataques pero no se presentaron a declarar.
El recorrido judicial y la fuga
Las salidas transitorias del detenido fueron firmadas por el juez Humberto González, del TOC N° 2 de Morón, quien aseguró que el imputado no podía perder el vínculo con su madre.
Fue así que si bien entre marzo y noviembre de 2011 se encontraba privado de su libertad en una cárcel de máxima seguridad, fue el mismo juez González quien pidió allí su traslado a la Unidad Penal de Ituzaingó.
En la última salida transitoria, el sábado 17 de agosto de 2013, Brauton fue custodiado por un efectivo del Servicio Penitenciario Bonaerense a ver a su mamá hasta la localidad de Mariano Acosta. Los voceros judiciales expresaron que el prisionero eludió al efectivo penitenciario que lo vigilaba dándole un somnífero oculto en una empanada.
Ese día se fugó y por su captura existía desde el año 2013 una recompensa de entre $20.000 y $300.000 a quien pudiera brindar información fehaciente que contribuyera a su localización y detención.
SEGUÍ LEYENDO
Ofrecen recompensa de $300 mil por datos del violador prófugo en Ituzaingó