Un matrimonio de Misiones quedó cerca del juicio oral por haber anotado como hijo del hombre a un nene al que querían adoptar. Alegando el consejo de su abogada, le cambiaron el apellido al chico y alteraron su identidad sin consentimiento de la madre biológica.
El chico, que hoy tiene 6 años, nació el 27 de enero de 2012. Su mamá, a quien se identificó como V.S., era por entonces menor de edad. Ella inscribió al bebé el 1 de febrero de 2012 con el apellido materno en el Registro Provincial de las Personas de la localidad de Dos de Mayo.
V.S. decidió dar en adopción a su hijo. Más tarde se sabría que su embarazo no fue buscado, sino que fue producto de una violación. Casualmente, su mamá trabajaba en la casa de una familia amiga de un matrimonio. Allí le comentaron que esta pareja, cuyos integrantes son identificados como J.F. y S.D., quería adoptar un niño. Así fue como iniciaron los trámites correspondientes.
La progenitora junto a sus padres y el matrimonio fueron convocados a una primera audiencia en Tribunal de Familia. La reunión era para explicar los pormenores del proceso de guarda y posterior adopción. Pero la cita no terminó como se suponía: la familia biológica desistió de la intención de entregar al chico, quien quedó al cuidado de su abuela. El repentino rechazo al pedido de guarda tomó por sorpresa a J.F. y S.D.
La cuestión parecía resuelta, pero al parecer la pareja continuó con su propósito de adoptar al pequeño. La Justicia supo más tarde que el niño no estaba al cuidado de su abuela, sino que se encontraba con J.F. y S.D. Ellos se lo habían llevado de viaje a la localidad bonaerense de Pergamino, según indicaron, para que recibiera atención médica por un problema de salud.
La familia biológica inició acciones legales el 10 de diciembre de 2012 en el Juzgado de Familia N° 1. Con el correr de la investigación, al matrimonio se lo imputó por los delitos de supresión de identidad de un menor y falsificación de documento público, previstos y reprimidos en los artículos 139 y 293 del Código Penal.
Se conoció que el 24 de agosto de 2012 la pareja se presentó en el Registro de las Personas de Dos de Mayo con el fin de insertar datos falsos en el acta de nacimiento. El hombre reconoció como propio al niño que pretendía adoptar, pese a conocer que él no era su padre. Así, el chico pasó de llamarse F.L.S. a F.L.F., tomando el apellido de J.F.
En la declaración indagatoria, los acusados dijeron que lo hicieron por consejo de su abogada. Conforme avanzó la investigación, desde el Ministerio Público Fiscal solicitaron la elevación del caso a juicio. La defensa realizó un pedido de probation que fue rechazado. Luego apeló este fallo. Pero en las últimas horas, el juez de la Sala IV de la Cámara Federal de Casación, Gustavo Hornos, actuando de modo unipersonal, también resolvió rechazar el planteo.
"El caso reclama la actividad eficiente, objetiva y garantizadora de los derechos en juego por parte del sistema de justicia. Se exige una respuesta a la situación que califico como de extrema gravedad con el objeto de evitar la causación de daños irreparables a los derechos a la integridad psíquica, identidad y protección del niño involucrado", mencionó en la resolución el magistrado.
Así las cosas, J.F. y S.D. quedaron más cerca de sentarse en el banquillo de los acusados y afrontar el debate oral ante el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional de Posadas.
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