Ariel "Guille" Cantero, acusado de ser uno de los líderes de una organización dedicada al tráfico y comercialización de estupefacientes, manifestó en la tercera jornada del juicio por la causa denominada "Los Patrones" que no quiere participar de las audiencias, pidió ser trasladado nuevamente a la cárcel de Chaco y aseguró que tanto él como el resto de los involucrados en la causa reciben mal trato en el penal Ezeiza, a donde arribó hace dos semanas.
Cantero, preso desde mediados de 2013, está siendo juzgado junto a Jorge "Ema" Chamorro, también miembro de Los Monos y otros 37 acusados, por haber continuado desde la cárcel santafecina de Piñero con la venta de cocaína y marihuana una vez que la banda fue desbaratada en 2015 y sus líderes fueron detenidos. Entre las personas juzgadas por el Tribunal Oral Federal 3 de Rosario también están las novias de Chamorro y Cantero, Jésica Lloan y Vanesa Barrios, y Celestina Contreras y Macarena Cantero, madre e hija de "Guille, respectivamente.
Los 22 miembros de la banda narcocriminal detenidos habían sido alojados en las cárceles de Devoto, Marcos Paz y Chaco pero el miércoles 12 de septiembre fueron llevados todos a la cárcel de Ezeiza, la de máxima seguridad del país, desde donde siguen el juicio por videoconferencia, esposados y custodiados. Los 17 acusados restantes lo hacen en la sala de audiencia ya que están en libertad o bajo prisión domiciliaria.
Este lunes, en la tercera jornada por el juicio, Cantero pidió ser trasladado nuevamente al penal de Resistencia, Chaco, de donde había pedido ser retirado en julio de este año. A pesar de que los acusados se negaron a declarar, "Guille" solicitó volver a Resistencia porque allá "recibía visitas" y porque, aseguró, tanto él como el resto de los acusados no pasan bien sus días de detención.
"Nos levantan a las 6 ó 7, hasta las 18. Estoy sin comer, nos meten en una jaula y nos dan un sándwich. No quiero formar parte de este juicio, quiero volverme al Chaco porque recibía visitas", dijo "Guille" Cantero por videoconferencia desde Ezeiza. También argumentó que extraña a sus hijos, a los que no puede ver porque, asegura, su familia puede visitarlo cuatro horas semanales y remarcó que no quiere "estar más en la audiencias".
El presidente del tribunal, Ricardo Vázquez, le permitió retirarse de la videoconferencia pero le explicó que deberá continuar alojado en Ezeiza, según informó el diario La Capital de Rosario.
Chamorro, en tanto, tampoco declaró pero hizo sus reclamos: "Tengo hijos chiquitos y uno en camino. No puedo ver a mi abogado, no tengo derecho a la defensa. Esto me provocó un daño psicológico y social". "Ema" aseguró también que el ataque que sufrió en la cárcel de Neuquén hace dos años le "dejó secuelas físicas". Su novia y la de Cantero se negaron a declarar.
La semana pasada, en otra de las audiencias por la causa Los Patrones, que tiene 269 testigos y 39 acusados, durante la videoconferencia los integrantes de la organización criminal se levantaron y comenzaron a golpear la mesa y la cámara -sobresaltando a los jueces, abogados y acusados que estaban a 320 kilómetros, en Rosario- para manifestar su descontento por los traslados y por las condiciones en las que deben seguir el juicio.
SEGUÍ LEYENDO: