Lee cuentos y novelas, escribe lo que en un futuro podría ser un libro autobiográfico y se entera por radio todo lo que se dice de ella. Así vive Nahir Galarza en su celda de la comisaría del Menor y de la Mujer en Gualeguaychú, a casi una semana de haber sido condenada a perpetua por el crimen de Fernando Pastorizzo.
En las últimas horas, los padres de la joven de 19 años -Marcelo Galarza y Yamina Kroh- recibieron un duro golpe: la viralización del video íntimo de Nahir con Fernando.
"Estamos haciendo todo lo posible para que la información no le llegue a ella, ese tema la tiene muy mal, hasta escribió una carta para que ningún medio lo publique", dijo a Infobae un allegado a Nahir.
La joven tiene acceso a una radio en la que escucha todas las noticias. Sus padres le aconsejan que no la escuche, que muchas cosas que se dicen son mentiras. "Me sorprende que todos hablen de mí", dijo la chica.
En la cuarta audiencia, el 11 de junio, cuando el fiscal Sergio Rondoni Caffa mencionó la existencia de se video, Nahir volvió a la sala y le advirtió: "¿Es necesario que lo muestre? ¿Por qué lo quiere mostrar? Si usted muestra ese video va a ser el responsable de que yo me suicide".
Infobae reveló, en una investigación de Federico Fahsbender, la trama secreta de ese video que fue filmado por Pastorizzo y descubierto por un perito de Gendarmería Nacional. Peragallo, el abogado querellante de Gustavo Pastorizzo, el padre de Fernando, llegó a pedir al tribunal presidido por el juez Mauricio Derudi que ese video sea proyectado. El juez no hizo lugar a ese pedido que en realidad sólo parecía tener como objetivo herir a la acusada.
Ahora que las imágenes se viralizaron en páginas porno y grupos de whatsApp, ¿quién fue el encargado de difundirlo? El video estaba en poder de la querella, de la Fiscalía, quizá de la defensa, pasó por especialistas de Gendarmería y está en un DVD que tenía el Tribunal que condenó a Nahir.
"Vamos a hacer una presentación a la Justicia para que se prohíba la difusión de ese material y para que se investigue de dónde salió. Eso no salió de cualquier persona. Es alguien que le quiso hacer un grave daño a Nahir", dijo José Ostolaza, uno de los dos abogados de Nahir Galaraza.
Mientras tanto, la joven pasa sus días en una pequeña celda. Ahora lee cuentos de Julio Cortázar (tiene los tres tomos), y espera empezar con alguna de las novelas de Gabriel García Márquez que le regalaron, entre ellas Relato de un náufrago. Además tiene libros de numerología y de tragedia griega. Y recibe cartas de personas que la apoyan y le creen que fue víctima de violencia de género.
En el juicio, ella declaró que Fernando le pegaba y la maltrataba verbal y psicológicamente. Además dijo que los dos disparos se le escaparon por accidente. "Quedé como aturdida, la mente se me puso en blanco, como apagada", declaró ante los jueces.
Aunque por momentos se desanima por la condena que recibió, planea retomar los estudios de Derecho y no descarta escribir un libro. "Ya que todos escriben sobre vos, es hora de que vos escribas sobre vos", le aconsejó un familiar.
El martes 3, Nahir fue condenada a perpetua. Recién podría salir en libertada a los 54 años, pero sus abogados confían en que en una instancia superior, ante las que apelarán, le bajarán la pena. La joven no fue a escuchar el veredicto. Se quedó en su celda, nerviosa, sin saber que en una sala judicial situada a unas 20 cuadras de la comisaría tres jueces resolvían su futuro.
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