Condenaron a una red de trata y prostitución en Corrientes

Fue en la localidad de Mercedes

Guardar

La Justicia Federal de Corrientes condenó a penas de entre ocho y diez años de prisión a cuatro personas acusadas de operar una red de trata y prostitución. A su vez ordenó investigar a funcionarios municipales de Mercedes por las habilitaciones entregadas a tres locales en los que eran explotadas sexualmente las víctimas.

En el fallo, los jueces condenaron a María Yolanda Casco, Sandra Beatriz Cerri e Ismael Piñeiro a ocho años de prisión, y a Claudette Krewer Ramos a 10, por trata de personas agravada por mediar abuso de situación de vulnerabilidad, por ser más de tres víctimas y por haberse consumado la explotación.

En el caso de Krewer Ramos, se vio agravado debido a que una de las víctimas era menos de edad y en otro caso una de las involucradas era su sobrina.

En el mismo acto fue absuelta Miriám Caceres, una de las imputadas, debido a que los jueces coincidieron en que carecía de responsabilidades por los actos ilícitos investigados.

La causa, que fue instruida por la jueza federal Cristina Pozzer Penzo y el fiscal federal de Paso de los Libres, Fabián Martínez, indica que hasta 2014 los acusados mantuvieron en funcionamiento los locales Tango, Casanova y Caprichos, donde explotaron sexualmente a, por lo menos, 21 víctimas de trata en Mercedes. En sus alegatos, Schaefer y López Breard presentaron como agravantes para los pedidos de condenas "el contexto generado para ejercer violencia de género sobre las víctimas", un detalle que no tiene antecedentes en la Justicia Federal de Corrientes en los tres juicios por trata y prostitución anteriores.

En sus alegatos, los fiscales de la causa dieron cuenta de la "violencia física y violencia simbólica permanente, manifestada en la comercialización de sus cuerpos y estigmatización mercantil de las víctimas para extraer dinero de sus cuerpos y sexualidad".

La investigación comenzó en febrero de 2014, cuando las 21 mujeres fueron rescatadas de los locales Tango, Casanova y Caprichos de Mercedes, a 245 kilómetros de la capital correntina. En tanto que fueron decomisados los inmuebles donde funcionaban los prostíbulos.

Guardar