"Yo vi cómo le dispararon a papá, lo fulminaron", le dijo Agustín (13), a su tía Roxana algunas horas después de que tres delincuentes le pegaran tres balazos a su padre en plena autopista Riccheri para robarle un cuatriciclo. Todo ocurrió el sábado pasado a la altura de la localidad bonaerense de Ezeiza. Hasta allí fueron para probar el vehículo que el hombre —identificado como Cristian Bejarano— le había regalado a su hijo como recompensa por el gran año que tuvo en el colegio.
De un momento a otro, mientras ubicaban el cuatriciclo en el tráiler que llevaban unido al auto para regresar a su casa, fueron abordados por dos ladrones que se movilizaban en otro vehículo. En un principio, Cristian no opuso resistencia y les entregó las llaves. Pero al no poder soportar la impotencia, tomó la peor decisión sin imaginarse el fatal desenlace: persiguió a los asaltantes cuando huían pensando que podría recuperar lo que le pertenecía.
El hombre llegó a tomar del cuello a uno de los ladrones, pero un tercer cómplice apareció en escena y le disparó tres veces. Un tiro en un tobillo, otro en una pierna y otro en el corazón. Murió en el acto y ante la vista del adolescente.
Agustín no sabía qué hacer. Lo único a lo que atinó fue a pedir auxilio a los autos que pasaban por el costado. Algunos detuvieron su marcha y lo asistieron. Pero no había mucho para hacer. Cristian ya estaba muerto y los asesinos escaparon. "Mataron a mi papá, por favor, ayúdenme", dijo el chico.
Los minutos posteriores al violento asesinato fueron filmados desde un camión que pasaba por el lugar. En el video puede observarse al menor junto al Peugeot blanco de su papá con el cuatriciclo aún enganchado, mientras otros testigos tratan de ayudarlo. Los autos que circulaban no entendían qué había ocurrido. Apenas miraban atónitos la secuencia el dolor y la desesperación del joven.
"Mi hermano les dio la llave, él siempre decía que había que entregar todo en un robo, y uno de los delincuentes se subió al auto. Ya se estaban yendo, pero al ver a su hijo desesperado gritar por su cuatriciclo, él los corrió", explicó después Roxana. "Me lo mataron a mi hermano como un perro adelante de mi sobrino. El nene vio todo", agregó.
La víctima se dedicaba a la compra y venta de autos. Tenía un hijo de apenas dos meses con Alicia, su nueva pareja. La madre del bebé pidió justicia por el crimen. "Queremos que los delincuentes paguen. Dejaron una familia destrozada, con muchos planes, muchos proyectos", relató a TN.
Los padres de Cristian, ya mayores, su hermana Roxana, sus amigos y pareja exigen que alguien les facilite las cámaras de seguridad privadas o municipales de la zona para poder empezar a investigar a los delincuentes que lo asesinaron. "Teníamos miles de proyectos. Estos hijos de puta nos arruinaron la vida", resumió la tía de Agustín.