Delincuentes se disfrazaron de policías y montaron un falso allanamiento para robar una peluquería

El hecho ocurrió en Merlo, provincia de Buenos Aires. El dueño del local forcejeó con los tres ladrones después de darse cuenta de la falsa historia y los delincuentes tuvieron que escaparse con las manos vacías

Guardar

Posiblemente, en un principio creyeron estar diseñando un gran golpe maestro: habían conseguido uniformes policiales, chalecos antibala, un maletín, investigaron los datos de los responsables de la peluquería que iban a atacar. Parecía el robo perfecto, pero se terminó de convertir en una escena bizarra y lamentable. Tres delincuentes quisieron robar un local en Merlo mediante un falso allanamiento y debieron escaparse con las manos vacías al ser descubiertos.

El hecho ocurrió el miércoles de la semana pasada en una peluquería ubicada en la calle Querandíes, en el barrio Libertad. Eran casi las 12:30 del mediodía, cuando César, el dueño, se estaba despidiendo de un cliente antes de cerrar el comercio.

De repente, estacionó en la puerta de la peluquería un auto civil VW Bora gris del que bajaron un hombre de traje con un maletín y dos supuestos efectivos policiales.

"Yo me asomé para ver de qué se trataba. Cuando abro, me llaman con mi nombre y apellido. Se ve que tenían data. Era raro que aparezcan policías por esta zona. Entonces, se me acerca el hombre de traje y me dice 'soy fiscal, tenemos que hacer un allanamiento por drogas", relató el peluquero, en declaraciones a Canal 9.

En un principio, el dueño del local no tuvo dudas de que se trataba de un robo, pero sí se vio sorprendido por el motivo que le daban para ingresar a su comercio.

"Estaban con una intención constante de llevarnos para la parte de atrás. Insistía una y otra vez con eso"; fue entonces cuando César empezó a exigir al supuesto fiscal que se identifiquen y que le enseñe la orden de allanamiento.

El falso fiscal empezó a ponerse nervioso con la situación. Por eso, les ordenó a los policías que esposaran a César "por resistencia al orden". Ese pedido del hombre de traje nunca se llevó a cabo.

Después de unos segundos, César intentó llamar a su esposa con el altavoz, cuando el falso fiscal le arrebató el dispositivo de manera violenta. "Ahí me di cuenta de que no era un allanamiento lo que estaba pasando y empecé a pelearme con ellos".

César le aplicó algunos golpes al fiscal, con el que forecejeó durante unos segundos. "Mi intención era salir afuera y pedir auxilio. Si me llevaban adentro, no se sabe lo que podía haber pasado".

De hecho, el propio peluquero nunca llegó a notar que los dos policías desenfundaron sus armas y salieron con ellas en mano a la puerta del local.

Una vez en la vereda, los policías quisieron hacerle volver entrar al local por la fuerza, pero César logró escaparse. Así, empezó a pedir auxilio a los gritos y varios vecinos de la cuadra salieron a la calle.

Fue entonces cuando los tres delincuentes vieron truncada la posibilidad de cometer el robo y escaparon lo más rápido posible sin nada en las manos.

Se espera que gracias a las cámaras de seguridad del local, la Justicia pueda dar con los delincuentes.

Guardar