El abogado Carlos Salvatore recibió una de las mayores condenas por narcotráfico de la Argentina. Fue condenado por el Tribunal Oral Federal de Resistencia a 21 años de prisión por asociación ilícita para el contrabando de más de una tonelada de cocaína a Europa escondida en tres cargamentos de carbón vegetal. Es la causa conocida como "Carbón Blanco".
Para los jueces, Salvatore estuvo detrás de los detalles del ocultamiento de la droga en las bolsas de carbón y cuando comenzaron a ser detenidos los miembros de la organización, mantuvo económicamente a sus familias para intentar asegurarse su impunidad.
En esa causa los jueces señalaron que "el imputado obró conforme a un plan sumamente complejo, diseñado con la participación de varios otros imputados, incluso con intervención en el exterior, y la connivencia de personal aduanero".
El número dos de la organización de Salvatore en "Carbón Blanco", Patricio Gorosito, fue condenado a 19 años de prisión. Gorosito es un empresario, con negocios en el fútbol europeo, que dirigía las operaciones desde Europa. Según la investigación habría sido una de las modalidades para lavar el dinero obtenido por el narcotráfico.
En 2002, Gorosito perdió las elecciones en el club de su pueblo -el Athletic Arroyo Seco- y un año después fundó su propio club: el Real Arroyo Seco. Construyó un estadio con capacidad para 12.000 personas sentadas, una obra llamativa para una institución que no tenía un solo socio.
Ahora Salvatore -sindicado como el jefe de la que se considera una de las mayores bandas de narcotraficantes de la Argentina- deberá declarar como imputado en otra causa ante el juez de Campana, Adrián González Charvay.
La investigación pudo determinar que Salvatore organizó, coordinó y financió el accionar de una organización que desde fecha incierta hasta diciembre de 2012 contrabandeó aproximadamente 1.200 kilos de clorhidrato de cocaína de máxima pureza a Portugal para luego ser distribuida a toda Europa. La droga se embarcó en Zárate, en la provincia de Buenos Aires, con destino al puerto de Alcántara de la ciudad de Lisboa.
La cocaína fue disimulada en el interior de tambores de pulpa de pera. El cargamento fue secuestrado luego de los controles practicados por las autoridades aduaneras portuguesas.
Como consecuencia de la colaboración prestada a la investigación por la Agencia Federal de Inteligencia, dirigida por Gustavo Arribas, se pudo establecer el rol protagónico que tuvo Salvatore en la organización y financiamiento de la organización narco. Según la tarea realizada por la Dirección de Narcotráfico de la AFI, Salvatore tuvo una actuación preponderante en el desarrollo, ejecución y supervisión de la maniobra para enviar la droga a Portugal. Esta operación es la denominada "Peras Blancas".
El abogado también está acusado de organizar, coordinar y supervisar la actividad de otro grupo delictivo. Esta organización tuvo a su disposición en un galpón en la calle 14 nro. 451, de la localidad de Lima, en el partido de Zárate, 235 kilos de cocaína que planeaban enviar a Europa oculta en tambores de pulpa de pera. En este caso, el trabajo realizado por la AFI permitió probar su accionar en las etapas de desarrollo, ejecución y supervisión de la banda. Por esta causa fueron condenados Héctor Daniel Schaín, Juan Carlos Rivero, Vanesa Cecilia González, Leandro Paulo Núñez y Jorge Orlando Sáez.
El cruce de datos de cinco causas vinculadas al tráfico internacional de estupefacientes hecho por el organismo que dirige Arribas sacó a la luz algunas conexiones de Salvatore. El abogado defensor del acusado y de Schaín es Luis Antonio Sasso. El estudio jurídico de este letrado y de Salvatore -según la investigación de la AFI- tiene domicilio en La Pampa 1517, de la Ciudad de Buenos Aires. Además, Sasso es vicepresidente segundo del Club Atlético Huracán y, de acuerdo con la pesquisa, habría tenido participación en la sociedad comercial "LC Producciones", cedida luego a Santiago Valles Ferrer, suegro de Salvatore.
La escribana que habría intervenido en esa cesión es Ana Cristina Palesa, quien mantendría vínculos con Guillermo Michel, jefe de Aduana y mano derecha de Ricardo Echegaray durante su gestión. Palesa aparece como abogada autorizante en varias sociedades vinculadas tanto a Salvatore como a familiares y allegados a él. También habría participado -según la investigación- de la sociedad "Sanis SRL", sobre la que se sospecha era utilizada para hacer envíos de clorhidrato de cocaína a Africa disimulados en cargamentos de arroz.
Mientras estaba con arresto domiciliario por problemas de salud, Salvatore afirmó durante una conversación telefónica con su mujer -detenida en una causa por lavado- que iba mandar a matar a la jueza chaqueña del caso Carbón Blanco, Zunilda Niremperger.
Ahora, Salvatore -detenido en el penal de Ezeiza- será trasladado con un fuerte operativo de seguridad a fin de comparecer ante el juez federal de Campana, Adrián González Charvay, para prestar declaración indagatoria.