Un incendio forestal se desató este jueves en un campo lindero al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, donde desde el mediodía trabajan bomberos y personal policial para sofocarlo, mientras se evalúan medidas de prevención en la terminal aérea.
El siniestro comenzó pasadas las 13 horas en los límites del cerco perimetral que rodea la zona de aterrizaje. Según informaron fuentes de la Policía Aeroportuaria (PSA) a Infobae, tras el reporte se conformó el Centro de Operaciones de Emergencia que actúa en estos casos.
En consecuencia, se movilizaron al lugar 12 dotaciones de bomberos que se encuentran realizando tareas en la zona para extinguir el fuego. Lo hacen en colaboración con oficiales de la PSA.
El incendio se originó a aproximadamente a dos kilómetros de la torre inicial del aeropuerto, pero se expandió rápidamente hasta acercarse al campo lindero.
Si bien el hecho produjo grandes columnas de humo negro que se ven desde el Aeropuerto de Ezeiza, hasta las 15:30 horas el incendio aún no había afectado su funcionamiento: no se habían registrado ni la suspensión ni el desvío de ningún avión.
La eventual cancelación o demora de vuelos será decidido por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) en tanto el incendio continúe y se analicen los riesgos posibles que la situación podría generar en los despegues o aterrizajes.
No obstante, fuentes que participan de los trabajos en la zona confían en que el siniestro no generará modificaciones en la terminal aérea y aseguraron a este medio que las llamas ya “están controladas”.
Un avión que llegaba a Aeroparque declaró la emergencia en el aire
Este miércoles un hecho que encendió las alertas en Aeroparque, cuando un avión de Aerolíneas Argentinas proveniente de la ciudad de Corrientes se declaró en situación de emergencia tras reportar humo en el sector de la bodega y solicitó aterrizar en la pista de Aeroparque con prioridad.
El episodio ocurrió en horas de la tarde y fue protagonizado por el vuelo AR 1749. Según informaron fuentes de la compañía aérea a Infobae, el episodio no constituyó un aterrizaje de emergencia, ni tampoco tuvo impacto en pasajeros ni la tripulación, aunque sí generó un momento de zozobra. Luego fue catalogado como un “incidente”.
De acuerdo a la información proporcionada desde la Policía Aeroportuaria (PSA), el reporte se realizó a las 15:45, cuando desde el avión emitieron un alerta por la presencia de humo en el interior del vehículo.
El piloto tomó conocimiento del suceso antes de su llegada a la Ciudad de Buenos Aires y a partir de que se encendió el indicador de pérdida neumática.
“El sistema neumático administra el flujo de aire que ingresa al avión a través del motor y lo distribuye a otros sistemas periféricos como ser el aire acondicionado o la presurización, por ejemplo. En este caso, la alarma indicó una posible falla en una válvula”, explicaron a este medio fuentes con información sobre el caso.
Desde Aerolíneas Argentinas indicaron que lo que hizo el comandante fue seguir protocolo correspondiente y declarar la emergencia para tener prioridad en el aterrizaje, el cual se concretó con normalidad.