Paro en 10 líneas de colectivos que circulan por CABA y el conurbano bonaerense: denuncian falta de pago

Desde la madrugada, al menos diez líneas de colectivos de la empresa Transporte Ideal de San Justo interrumpieron sus servicios en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y el oeste del conurbano bonaerense debido a la falta de pago de salarios correspondientes a diciembre.

Las líneas que no prestan servicio son la 193, 4, 49, 86, 88, 96, 185; la 205, 621 y la 502.

“La retención de tareas arrancó a las 0 horas. El motivo es que se adeuda el 40% del salario de diciembre, y un 25% del aguinaldo”, indicó Pablo, delegado de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que estimó que son cerca de 870 trabajadores en la empresa.

Se trata de un reclamo constante que vienen llevando a cabo los choferes de diversas empresas de la zona metropolitana ante las demoras en los pagos de salario.

El cese de actividades continuará hasta que se regularicen los pagos, conforme a lo indicado por los trabajadores. Los conductores denuncian no solo la liquidación de los haberes adeudados, sino que es una dificultad recurrente la incertidumbre sobre el cobro.

“Hay compañeros que están en parte médico y no cobran el sueldo; hay compañeros en vacaciones que tienen que esperan una o dos semanas para que les paguen las vacaciones. Hay gente que está en la Costa, y hoy se están enterando que no cobran. Es una impotencia, da mucha bronca, ya no se puede más”, dijo otro los empleados que se manifestaban.

Miles de pasajeros quedaron afectados por el conflicto. El recorrido que hacen las líneas de la empresa, como la 96, atraviesa la Capital Federal, llegando al barrio de Constitución, y las localidades matanceras de Virrey del Pino, Laferrere, Rafael Castillo, y el partido bonaerense de Merlo. Mientras que las línea 621 circulan entre Ramos Mejía y González Catan; y la 205, entre Liniers y Pontevedra (Merlo), entre otros trayectos.

El conflicto se suma a otros reclamos recientes de choferes de diversas empresas de transporte, quienes denuncian demoras reiteradas en la acreditación de sus sueldos.

Las paritarias firmadas a finales de octubre por la UTA fijaron un sueldo básico de $1.160.000 desde diciembre, con un incremento a $1.200.000 en enero, aunque el incumplimiento en los pagos de diciembre desató la medida de fuerza actual.

Lo cierto es que ese pago estaría sujeto a la aprobación de una nueva estructura de costos por parte del Ministerio de Economía y la Secretaría de Transporte.

“Los trabajadores no quieren ser más rehenes de la pelea de la empresa y del Gobierno por el tema del subsidio y el amento de tarifas. En el medio quedamos siempre los trabajadores”, sostuvo Pablo, en declaraciones a C5N, desde una de las cabeceras de la compañía, sobre la avenida General Paz, Ruta 3, en el km 27.

Sin embargo, tras el acuerdo paritario, comenzaron los problemas en la liquidación de haberes por la clásica puja con Nación y las cámaras sectoriales por los subsidios del sector.

A fines del año pasado, hubo otras líneas de colectivos que protagonizaron conflictos por incumplimiento en el pago del aguinaldo, en el servicio de las unidades de 148, 159, 500, 4, 49, 86, 88, 96, 97, 185, 193, 205, 621, 176 y 448.

Las cámaras empresarias de transporte de las líneas habían advertido que no estaban en condiciones de abonar el aguinaldo de manera completa, si no se aumentan los subsidios o el boleto de colectivos, que se encuentran congelados desde agosto.

Ante esas dificultades, los representantes del sector patronal propusieron que los trabajadores perciban en “hasta seis cuotas” el Sueldo Anual Complementario (SAC), en la medida que no se resuelva la situación de los ingresos de las compañías. Finalmente, las conversaciones entre las partes evitaron que el conflicto escalara.

Esta semana, las cámaras empresarias señalaron que nunca antes se había llegado a una situación en la que un acuerdo salarial homologado no estuviera acompañado de los ajustes necesarios en los costos operativos.

“Los hechos y costumbres preexistentes y las palabras de las propias autoridades que alentaban la necesidad de acordar, obraron de tal manera de considerar absolutamente factible la actualización de los costos salariales y no salariales a partir de noviembre de 2024”, consideraron las empresas en una carta enviada al secretario de Transporte, Franco Mogetta, en la que solicitan una reunión urgente.

En su pedido de audiencia, las empresas también denunciaron un error en la Resolución ST 34/2024, que calculó de forma incorrecta los ingresos provenientes del sistema SUBE, lo que provocó una caída de $34.000 millones en la recaudación, afectando gravemente al sector.

En paralelo, se discuten cambios en el sistema tarifario de transporte en la Ciudad de Buenos Aires. Desde el traspaso de la jurisdicción nacional a la ciudad, el gobierno porteño tiene la facultad de fijar tarifas para las 31 líneas que operan exclusivamente en el territorio capitalino.

El próximo 10 de febrero se llevará a cabo una audiencia pública para analizar un aumento del 9,97% en las tarifas. De implementarse, el boleto mínimo en la ciudad pasaría de $371,13 a $408,24 en marzo de 2025, mientras que otros tramos, como el de 6 a 12 kilómetros, llegarían a $489,82.

Mientras se incrementan estos boletos, la Tarifa Social continuará ofreciendo un descuento del 55% a beneficiarios de ANSES, lo que dejará el boleto mínimo en $183,71 para jubilados, pensionados y otros grupos vulnerables.