Agustín Orforte es uno de los dos pilotos que murió esta tarde en la tragedia de San Fernando. Su papá, Carlos Orforte, también había fallecido en un accidente aéreo, en noviembre de 1998. Además, se conoció en las últimas horas que las dos víctimas de este miércoles estaban unidas por un parentesco indirecto.
Según relevaron las crónicas periodísticas 26 años atrás, Orforte padre -piloto civil- manejaba un helicóptero para la empresa Transener. Él y un compañero, Alberto Pirillo, habían salido en una operación conjunta, cada uno en un Bell 206-B.
Su tarea era controlar desde los aires el tendido eléctrico del Buenos Aires Golf, un barrio privado de Bella Vista. Repentinamente, la aeronave de Orforte golpeó a la de su compañero y ambos se precipitaron.
El helicóptero del padre del piloto fallecido hoy en San Fernando cayó en picada sobre el country. Las notas de aquel año le atribuyeron la propiedad del Golf al difunto empresario Franco Macri. El segundo piloto sobrevivió al accidente.
“Volábamos separados por unos 100 metros y en cierta forma mi máquina se tocó con la de mi compañero. Recuerdo simplemente que sentí la alarma del motor, mi helicóptero respondió a los mandos e hice una espiral para bajar sobre los árboles. Desconozco lo que pasó entonces con el otro aparato. Lo perdí de vista cinco segundos antes de la caída sobre mi lateral derecho”, dijo Pirillo, el sobreviviente, en una declaración que publicó el diario La Nación en 1998.
La relación que une a las familias Orforte y Fernández Loza
Agustín Orforte y Martín Fernández Loza, los dos pilotos que murieron hoy en San Fernando, eran familia.
La madre de Orforte estuvo en pareja con Carlos Fernández Loza -que también era aeronavegante-, pariente de Martín, hasta el día de su muerte, en marzo de 2020. Aquel día Agustín lo despidió con una foto y un mensaje en sus redes sociales: "Lo mejor que me pasó, compartir vida y pasión con vos... Frecuencia Mike!“, posteó.
Ambas grupos familiares comparten, además de los lazos afectivos, la devoción por volar. Son varios los Fernández Loza que trabajan en el mundo de la aviación -principalmente en zona norte y Mar del Plata-, según pudo saber este medio.
El caso
La tragedia ocurrió este miércoles pasadas las 13.15, cuando la Jefatura de la Unidad Regional de Seguridad Aeroportuaria I del Este de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), recibió el alerta de que una aeronave matrícula LV-GOK siguió de largo durante el aterrizaje, pasando el alambrado perimetral del Aeropuerto Internacional de San Fernando, impactado con las viviendas.
“Se desconocen hasta el momento los motivos del despiste”, se informó oficialmente en una causa en la que interviene el Juzgado Federal N° 1 de San Isidro, a cargo de Sandra Arroyo Salgado.
El avión cayó en la intersección de José Terry y Charlín, una calle lindera al aeropuerto de San Fernando, e impactó contra una casa, generó daños con otra y dejó calcinado un auto estacionado.
“La casa no se vino abajo, pero está toda agrietada”, agregó. La vecina explicó que hubo tres explosiones luego del impacto de la aeronave. Los primeros en llegar al lugar fueron efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, junto a Bomberos e integrantes de la Policía Federal con asiento en la terminal de San Fernando. Al llegar encontraron en el avión a las dos víctimas, ya sin vida.
Los vecinos que viven en el lugar del impacto fueron evacuados. Los uniformados indicaron que no se registraron heridos de gravedad, pero sí hubo que asistir a varios de ellos.
La aeronave involucrada es un Challenger 300, perteneciente a la familia de Jorge Brito, dueño del Banco Macro y presidente de River. Había realizado un viaje a Punta del Este y regresaba a Buenos Aires.