A lo largo de los próximos días, las temperaturas se mantendrán cálidas en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, con precipitaciones hacia el final de la semana y un descenso en las marcas térmicas a partir del sábado. Durante este miércoles, se espera una jornada entre ligera y parcialmente nublada, sin posibilidades de lluvia. Las temperaturas oscilarán entre los 16 y 27 grados.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, mañana se experimentará un calor intenso en la zona, alcanzando una mínima de 17 grados y una máxima de 31 grados. A pesar de algunas nubes en el cielo, no se esperan precipitaciones.
Sin embargo, el viernes se prevé un cambio en las condiciones meteorológicas, con la llegada de los chaparrones al AMBA durante la mañana. Las temperaturas oscilarán entre los 19 y 28 grados, y el cielo se presentará mayormente nublado el resto de la jornada.
El fin de semana se verá un importante descenso de temperatura. El sábado será fresco, con temperaturas entre los 12 y 21 grados y un cielo nublado por la mañana. El domingo tendrá condiciones similares, con una mínima de 13 grados y una máxima de 24 grados, manteniéndose el cielo entre algo y parcialmente nublado, sin precipitaciones previstas.
Para el lunes se anticipa una oscilación térmica entre 16 y 28 grados. En tanto, el martes (último día incluido en el pronóstico extendido del SMN) tendrá temperaturas mínimas de 18 y máximas de 29 grados, con el cielo parcialmente nublado.
El SMN cambió su pronóstico de calor para el verano
El organismo meteorológico publicó el nuevo pronóstico trimestral que abarca los meses de diciembre, enero y febrero. Según los datos sobre temperaturas y precipitaciones medias, se esperan marcas superiores a las normales en casi todo el país y menos lluvias de lo habitual en el oeste y sur de la Patagonia. Las proyecciones presentan algunas diferencias con respecto a las anteriores, publicadas en octubre.
Respecto de las temperaturas, hay mayores probabilidades de valores térmicos normales o superiores sobre el norte del Litoral (en Misiones, Corrientes y algunas zonas de Entre Ríos, Santa Fe, Chaco y Formosa) y al sur de la Patagonia, en Tierra del Fuego y la porción sur de Chubut. El resto del país, incluyendo la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano y todos los municipios de la Costa Atlántica, tendrá marcas superiores a las habituales pero en comparación con el informe anterior, las chances son ahora un poco menores.
Para definir las tres categorías se utilizan “terciles”, que se obtienen separando en tres partes iguales los datos de, en este caso, la temperatura. Luego, se ordenan de menor a mayor. “Para la temperatura, se puede considerar que el tercil central implica valores de aproximadamente 0.5°C por debajo o por encima del valor medio. Valores por encima o por debajo de ese rango serían temperaturas inferiores o superiores a la normal”, explica el SMN.
En ese sentido, la mayor parte de las provincias se encuentran en la tercera categoría, con una probabilidad del 45% al 50% de que los valores térmicos sean superiores a los normales. Por otro lado, en las jurisdicciones con temperaturas normales o superiores, ese porcentaje disminuye a un rango del 40% al 45%. Los distintos tonos de colores no hablan de la intensidad del calor, sino de cuán probable es que la categoría domine en los próximos 90 días.
El informe anterior, publicado el pasado 31 de octubre, presentaba algunas diferencias. Por ejemplo, la probabilidad de experimentar temperaturas por encima de lo normal eran todavía más altas -entre un 50 y un 55%- en el centro y este de la provincia de Buenos Aires. En cambio, en el este y sur de la Patagonia se estimaban valores habituales.
El informe también advierte sobre precipitaciones inferiores a las habituales sobre el oeste y sur de la Patagonia, desde Neuquén hasta Tierra del Fuego; hacia el este de la misma región se prevé que sean normales o inferiores a la media. En cambio, lo contrario ocurre en las provincias del NOA y la región de Cuyo, desde Jujuy hasta Mendoza, con proyecciones normales o superiores a lo habitual respecto a la caída de agua. Sobre La Pampa, Provincia de Buenos Aires, CABA, Córdoba, este de San Luis y oeste de Santa Fe se anticipan parámetros normales.