En medio de la conmoción por la muerte de Juanita Milagros Sirimarco Díaz, la adolescente misionera que murió de un shock séptico el pasado sábado luego de volver de un viaje de egresados en Córdoba, una docente difundió una carta en donde la niña relataba sus aspiraciones. “Me invade el dolor de saber que esos sueños quedaron sin cumplir”, lamentó la profesora en la publicación.
“Mi materia favorita es matemática y la que más me dificulta es lengua. Fuera de la escuela practico karate, básquet, ballet, ajedrez e inglés. Soy excelente en todo lo que hago y aunque suene mal, es la verdad, porque me esfuerzo en todo y trato de ser la mejor versión en mí”, comenzaba el mensaje de Juanita, que en aquel momento tenía 12 años.
La adolescente aseguraba que le gustaba leer, en especial libros de política, y que planeaba estudiar Economía y Arquitectura en la universidad. “La mayor meta que me propongo es ser presidente de la Argentina. Voy a dedicar toda mi vida a esto; si no lo cumplo habré desperdiciado toda mi vida. Este pensamiento me ayuda a no rendirme y seguir estudiando”, anhelaba.
La carta fue difundida por Gabriela Petit, quien fue docente de Juanita en el curso de ingreso a la escuela industrial. Las palabras fueron compartidas por la niña en el primer día de clases.
“Nunca imaginé que estas líneas serían un testimonio de sus sueños, sus objetivos y de todo lo que esperaba del futuro. Mi corazón está lleno de dolor y angustia por su partida. Juani fue una luz en el aula, y su ausencia deja un vacío imposible de llenar”, lamentó la docente, a través de su cuenta de Facebook.
Y añadió: “Conocerla fue un regalo que siempre atesoraré. Hoy me invade el dolor de saber que esos sueños quedaron sin cumplir, pero su luz, su energía y sus ganas de ser la mejor versión de sí misma seguirán viviendo en todos los que te conocimos. Descansa en paz, querida Juani”.
La muerte de Juanita no está exenta de polémica. Originaria de Misiones, el martes pasado comenzó a sentirse mal luego del viaje a Córdoba y fue ingresada al Hospital Pediátrico Fernando Barreyro, donde quedó internada para hidratación y estudios médicos. A través de ellos, los médicos diagnosticaron una sepsis, con positivo en Influenza B, y subrayaron la gravedad del cuadro infeccioso.
Su muerte fue confirmada cuatro días más tarde, el sábado 12 de octubre. Recientemente, el infectólogo Oscar Herminio López, quien atendió a Juanita, señaló que el virus de la Influenza B rara vez provoca cuadros tan graves, pero advirtió que existe una “alta sospecha” de que la menor sufriera una sobreinfección bacteriana. “Para confirmar esa posibilidad, tiene que haber rescate de germen, y los laboratorios de bacteriología suelen llevar un tiempo”, explicó.
López mencionó que en muchos casos los pacientes pueden presentar síntomas similares a una infección bacteriana sin que se logre identificar el germen responsable. “Muchas veces los pacientes mueren con cuadros y síntomas compatibles con una infección bacteriana y no siempre se logra rescatar el germen”, aclaró el infectólogo en diálogo con El Doce.
La menor quería bajarse del colectivo porque se sentía mal
En cuanto a los días previos al agravamiento del estado de salud de Juanita, el instituto educativo explicó que el 5 de octubre la joven sufrió una lesión en la rodilla izquierda mientras participaba en una actividad recreativa en un parque acuático. Según el comunicado, fue atendida en el Sanatorio Punilla, donde se le diagnosticó la Enfermedad de Osgood-Schlatter y se le recomendó un control posterior en su lugar de residencia. La situación se volvió crítica una vez que llegó a la ciudad de Posadas, siempre de acuerdo a lo consignado por la institución.
Claudia Díaz, madre de Juanita, denunció que durante el viaje de regreso su hija comenzó a manifestar síntomas graves, pero a pesar de sus reiteradas solicitudes, no se detuvieron para brindarle atención médica. “Le suplicaba a la maestra que parara en un hospital, pero no lo hicieron”, afirmó Claudia entre lágrimas en una entrevista con TN.
Y sumó: “Cuando hablé con mi hija, me dijo ‘mamá, ya no puedo más, necesito bajarme’, y yo le pedí a la maestra que la llevara a un hospital, pero me dijo que no iba a parar porque estaban corriendo contra el tiempo”.
Claudia Díaz también reveló que en lugar de priorizar la salud de su hija, el grupo realizó una parada para desayunar, lo que, según su perspectiva, agravó el estado de Juanita. “Nadie hizo nada. La maestra la tuvo ahí en el micro haciéndole paños fríos”, agregó con indignación. La madre informó que iniciará acciones legales contra la empresa de turismo, el colegio ICRA y las maestras acompañantes por no haber llevado a la adolescente a un centro médico en el momento oportuno.