Luego de que el Ministerio de Salud anunciara el cierre del Hospital Laura Bonaparte, especializado en el tratamiento de la salud mental, los trabajadores de la institución iniciaron un reclamo en los alrededores del edificio. Pese a que la protesta comenzó por la tarde, continuó a lo largo de la madrugada con una vigilia. “Pasamos la noche acá un grupo. Vamos a estar todo lo que tengamos que estar”, advirtieron en declaraciones a Infobae.
Según los trabajadores, “los números que circulan sobre las atenciones son equivocados”. “Solo la línea 0800 de psicólogos que atiende llamados de todo el país, en septiembre atendió más de 1.800. Tenemos guardia las 24 horas de los 365 días y atención de salud mental de niños, niñas y adolescentes, en un contexto en el que vienen en aumento los suicidios en esa población”, señaló Leonardo Fernández Camacho, delegado general de ATE.
En tanto, Soledad Bordalecou, una de las profesionales del centro médico, indicó que fueron informados del cierre de la guardia y las internaciones durante una audiencia realizada a las 14 del viernes. “No lo esperábamos en lo absoluto”, confesó, y recordó que ya habían atravesado una reducción significativa en el personal durante los últimos meses.
“Hace tres meses despidieron a 29 profesionales, no les renovaron los contratos y ahora nos dicen que el hospital va a cerrar completamente”, relató la trabajadora.
A raíz de esta situación, los trabajadores se organizaron para reclamar y convocaron a la sociedad a sumarse a la manifestación por medio de un comunicado en las redes sociales. “Los trabajadores del hospital en asamblea general decidieron permanecer en sus puestos de trabajo y llaman a todos los ciudadanos, usuarios, familiares, profesionales, asociaciones civiles, sindicales, asambleas barriales y a la comunidad entera a sumarse en la lucha y defensa del hospital y la salud pública”, manifestaron al indicar que el punto de encuentro será en Combate de los Pozos y Caseros.
Horas después de que comenzara la manifestación, el Ministerio de Salud nacional publicó un comunicado para explicar que el cierre del nosocomio formaría parte de un plan de reestructuración. “La decisión responde al objetivo de priorizar la asignación de los recursos en los pacientes que lo necesitan”, destacaron, y agregaron que el ministerio estaría a cargo de derivar a los pacientes internados a otras instituciones.
“Se trabaja en la normalización del Hospital producto de la subutilización en función de su capacidad, lo que se manifiesta en la reducida cantidad de pacientes que se atienden en la institución”, señalaron al hacer referencia a que unos 17 mil millones de pesos son entregados anualmente para el funcionamiento de los servicios que ofrece. Sin embargo, las autoridades subrayaron que el Bonaparte “cuenta con una muy baja ocupación”.
En este sentido, desde el ministerio informaron que el centro de salud público cuenta con un promedio anual de 19 internaciones diariamente. “Los indicadores de cantidad de atención y consultas resultan muy bajos para lo esperable de un hospital con servicios generales”, evaluaron al hacer hincapié sobre las dimensiones edilicias y la cantidad de recursos humanos utilizados.
“El Ministerio de Salud garantiza la continuidad de los tratamientos de los pacientes internados”, concluyó el comunicado. No obstante, los trabajadores del Bonaparte contrastaron la información brindada por las autoridades sanitarias al asegurar que a lo largo de este año se atendieron a más de 25 mil pacientes. Asimismo, denunciaron que el cierre del hospital dejaría “sin tratamiento a miles de pacientes en salud mental, incluyendo niñas, niños y adolescentes”.
Por otro lado, el dirigente peronista Juan Grabois estuvo presente en el lugar para apoyar a los profesionales de la salud mental y aseguró que “acá se atienden todos los días más de 700 personas que vienen por guardia”. Incluso, apuntó que el dato brindado por el Gobierno sería falso, debido a que la capacidad de internación estaría completa actualmente.
“En este momento que hay una pandemia de salud mental y de adicciones, cerrar el hospital de referencia nacional es de una crueldad que no tiene nombre”, sentenció el abogado durante una conversación con el noticiero de Crónica TV. De la misma manera que explicó que los trabajadores de la salud se negaban a abandonar el lugar y dejar a la deriva a los pacientes, adelantó la posibilidad de que se realice una marcha el próximo jueves que coincide con el día de la salud mental.
A pesar de que la medida no fue confirmada, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) adelantó que se evaluaría la posibilidad de profundizar las medidas de fuerza. “Lo único que hicieron hasta aquí fue desmantelar programas. No vamos a permitir que se cierre un hospital como el Bonaparte, que es referencia y modelo en salud mental en todo el país”, denunció el secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, por medio de un comunicado publicado por el sindicato.
“No nos pueden mentir, no se trata de números. Este hospital brinda un servicio esencial a toda la comunidad. Hemos decidido permanecer de manera pacífica en las instalaciones y no descartamos que en las próximas horas las acciones incrementen”, reafirmó el dirigente sindical al señalar que están en juego casi 700 puestos de empleo. Por último, anticiparon que no van a aceptar “ningún tipo de criminalización y judicialización de la protesta”, y concluyeron: “Estamos ejerciendo nuestro legítimo derecho a trabajar”.