Finalmente las advertencias del Servicio Meteorológico Nacional empezaron a hacerse realidad. Pasadas las 14 comenzó a diluviar en el AMBA. Vecinos de varias localidades bonaerenses publicaron en redes sociales videos que muestran la caída de granizo en el conurbano y alrededores. La situación se replicó poco después en el sur de la Ciudad de Buenos Aires, donde cayeron piedras pequeñas durante algunos minutos.
Desde el mediodía el organismo emitió alertas de muy corto plazo en las que anticiparon tormentas fuertes con lluvias intensas, ráfagas y ocasional caída de granizo en el norte de la provincia de Buenos Aires y el sur de Entre Ríos. Lo mismo para municipios ubicados al sureste del AMBA, como Berazategui, Berisso, Florencio Varela, La Plata, Quilmes y San Vicente, entre otros. Para las 15.30 la intensidad del diluvio había mermado.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), un total de 13 provincias y la Ciudad de Buenos Aires estarán bajo alerta por la llegada de tormentas, vientos y nevadas a lo argo de todo el jueves.
El pronóstico informó que en la Ciudad de Buenos Aires y Provincia, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Santa Fe y Chaco regirá un aviso de nivel amarillo por tormentas. A lo largo de la jornada, se registrarán lluvias intensas, entre 10 y 40 milímetros de precipitaciones, granizo y ráfagas de hasta 80 kilómetros por hora en algunos sectores.
Al mismo tiempo, las provincias que también se vieron alcanzadas por la alerta amarilla por vientos serán La Pampa, Río Negro, Córdoba, San Luis, San Juan, La Rioja, Mendoza y Neuquén.
Los sectores con advertencias amarillas experimentarán vientos de entre 30 y 60 kilómetros por hora, con ráfagas entre 85 y 120 km/h. En tanto, en las zonas naranjas el fenómeno será de entre 50 y 90 km/h, con ráfagas mayores o iguales a los 120 km/h.
Asimismo, el oeste de Neuquén y Mendoza se encuentran en alerta por nevadas de entre 20 y 60 cm. En el territorio sanjuanino y mendocino también estarán alertados a raíz del paso del viento zonda que había afectado al norte neuquino y sur mendocino este miércoles.
De acuerdo a los especialistas del organismo, el viento zonda podría ser intenso, debido a que la velocidad varía entre 50 y 65 km/h, en el nivel naranja. Al mismo tiempo, el fenómeno climático podría alternarse con ráfagas de viento que superarían los 90 km/h, por lo que se reduciría la visibilidad, habría un aumento repentino de la temperatura y el porcentaje de humedad se mantendría en valores bajos.
Previo a esto, el meteorólogo del SMN Lucas Berengua había anticipado que “hay una situación meteorológica particularmente complicada que da lugar a varios alertas meteorológicos”, al explicar que se trataba de “un sistema de mal tiempo posicionado en el océano Pacifico y acercándose a nuestro país va a interactuar con aire cálido que ya está ingresando al centro del país”.
Como consecuencia de las condiciones climáticas adversas que afectarán a gran parte del país, las autoridades publicaron una serie de recomendaciones para evitar que los ciudadanos se pongan en riesgo. En el caso de las regiones afectadas por las tormentas, pidieron no realizar actividades al aire libre, no refugiarse cerca de árboles, postes de electricidad y/o estructuras que pudieran caerse.
Al mismo tiempo que recordaron mantenerse alerta ante la posibilidad de que caiga granizo, aconsejaron no permanecer cerca de playas, ríos, lagunas o piletas, con el objetivo de minimizar los riesgos de ser alcanzado por un rayo. Asimismo, solicitaron no sacar la basura y, en lo posible, quitar los objetos y elementos que pudieran obstruir los desagües.
Para aquellas personas que se encontraran en zonas alertadas por vientos y viento zonda, los expertos reiteraron el pedido de mantenerse en lugares cerrados y remarcaron que, si es inevitable salir, intenten reducir su exposición a la radiación solar. De la misma forma, solicitaron mantener distancia con cables eléctricos ante cualquier accidente que pudiera ocurrir.
Finalmente, subrayaron que estará prohibido generar fuego y utilizar materiales inflamables, debido a que la sequedad del ambiente incrementa los riesgos de que se propaguen incendios forestales. Sobre todo, después de los episodios que se reportaron en las últimas semanas producto de la falta de lluvias en la región.