Aspirantes navales: cómo formar parte de la Escuela de Suboficiales de la Armada

En la base naval de Puerto Belgrano, a unos 30 kilómetros de la ciudad de Bahía Blanca, se encuentra la Escuela de Suboficiales de la Armada (ESSA) un gran edificio de enseñanza y alojamiento para los aspirantes al cuadro de suboficiales en su etapa básica. Y allí se cursan las 52 carreras de estudio (28 con título terciario reconocido) cuya inscripción para 2025 se encuentra abierta hasta este 30 de septiembre. Todas las carreras son gratuitas y tienen un costo de inscripción de 8 mil pesos.

”Al día de hoy hay 1100 inscriptos y unos 700 que están terminando de inscribirse. El número estipulado para este año es de 1500 aspirantes, con un cupo máximo de 1200 personas como pupilos en Puerto Belgrano”, ratificó a Infobae el Capitán de Navío, Marcelo Raúl Rojas, director de la ESSA. Y agregó que para llegar a ese número final de estudiantes, todos los aspirantes deberán atravesar dos fases previas.

Primero, los estudiantes realizarán un examen de ingreso a realizarse entre el 15 y 16 de octubre, (en conjunto con los aspirantes de la Escuela Naval Militar) que incluirá varias etapas. “La primera será aplicar conocimientos académicos en matemática, comprensión y producción de texto (teórico y práctico) como así también contenido correspondiente al escalafón elegido, como física y química”, explicó Rojas.

El siguiente filtro será un “período de inducción”, una instrucción previa intitulada Periodo Selectivo Preliminar (PSP), que dura entre 30 y 45 días, y determina el número final de estudiantes del próximo año lectivo a desarrollarse de marzo a diciembre. “Es una adaptación de la vida civil a la militar. Si lo cursan unos 1500 aspirantes, 1000 superarán la prueba”, graficó, sobre el “filtro” del curso preliminar.

Dentro de esta segunda etapa, el estudiante también deberá atravesar las Pruebas de Rendimiento Físico que abarcarán pruebas de coordinación, fuerza abdominal, fuerza de brazos, resistencia aeróbica, flexiones de brazos en barra, nado libre de 25 metros en parte baja, flotación y riñonada (medir el nivel de dominio de inmersión por sus propios medios) como así también pruebas de nado subacuático y salto de arrojo, entre otros desafíos.

Luego de superadas ambas pruebas, los aspirantes podrán elegir entre dos modalidades, las Carreras de Cuadro Permanente o el Curso de Integración Militar (CUIM). Este último tendrá una duración de seis meses y un tiempo máximo en el servicio activo de 13 años.

La ESSA incluye el Aula Magna, la biblioteca, el centro de fotocopiado y más de 15 gabinetes de prácticas. El predio comprende además amplios talleres de enseñanza -como el de Máquinas, Electricidad y Electrónica, Artillería y Aviación, y Marinería– además de otras instalaciones como la Plaza de Armas y un polígono virtual. “Allí se cursan clases como aspirantes navales, cada uno hace una especialidad, cursa una determinada cantidad de materias, para ir generando su orden de mérito junto a actividades como mecánica, tiro, sistemas eléctricos acordes a la especialidad. En cada carrera hay exámenes parciales y finales”, englobó el director de la Escuela.

Dentro de los escalafones en las carreras de cuadro permanente, Rojas destacó Mar, Operaciones (navales), Arsenales (armas), Aeronáuticos (que se cursa en las bases aeronavales), Infantería de Marina (resaltando las orientaciones de infantería, artillería y comunicaciones), Mecánicos de Sistema, Maquinistas (orientación motoristas), Servicios Hidrográficos, Meteorología, Enfermeros y Apoyo General (resaltando a los camareros y conductor de vehículos).

Por su parte, agregó que “los estudiantes egresan con una capacitación que les permite desempeñarse en el destino asignado para empezar a la carrera naval con una inmediata salida laboral. “Los aspirantes reciben un sueldo mensual de alrededor de $193.000 y, cuando egresan como Cabo Segundo, pasan a cobrar unos $539.000″, comentó Rojas a este medio. Vale recordar que, durante la carrera, el estudiante recibe alojamiento y comida en forma gratuita en la base naval.

En cuanto a la jornada de instrucción, el pupilo ingresa los domingos a la noche a la base y está allí está hasta el sábado al mediodía. Los períodos de licencia son, aparte de un fragmento de cada fin de semana, durante 14 días en el mes de julio (que coinciden con las vacaciones de invierno escolares) y el receso de verano que abarca todo el mes de enero. “La mayoría de los inscriptos son del noroeste y del noreste del país, después tenemos un gran porcentaje oriundo de la zona de Bahía Blanca, Punta Alta y alrededores y también un porcentaje menor de CABA y la provincia de Buenos Aires”, agregó el titular de la Escuela.

Según el director de la ESSA, una vez que los estudiantes terminan el curso de dos años, la Armada Argentina distribuye a los egresados a distintos puntos del país según las necesidades y orientaciones de cada uno. “La mayoría de los egresados estarán en Puerto Belgrano, pero también podrán formar parte del Hospital Naval Pedro Mallo (ciudad de Buenos Aires), algunos infantes de marina podrán ir al Arsenal de Artillería de Marina en Zárate, los furrieles (secretarios administrativos) podrán formar parte del Edificio Libertad (sede principal de la Armada Argentina), de la sede Vicente López o Dock Sud”, agregó Rojas. También podrán ser derivados a Mar del Plata, Misiones, Tierra del Fuego o bien a la Base Aeronaval Trelew, entre otros destinos.

“Las divisiones troncales más elegidas entre los estudiantes son la de Mar y de Infantes de Marina. Hay mucha oferta, por parte de los alumnos, para integrar las tripulaciones de los barcos (superficie) como así también las especialidades de buque, operaciones, motoristas como así también infantería de marina y servicios”. Y con respecto a las necesidades de la Armada Argentina, Rojas fue puntual: “Se requieren enfermeros, infantes y tareas de apoyo en general”.