A cuatro días del sangriento atentado ocurrido en Allenby, el paso fronterizo que comunica Jordania y Cisjordania donde fue asesinado el argentino Adrián Marcelo Podzamzcer, su esposa, Marcela Faierman, brindó una entrevista en la que reveló detalles del crimen y contó que se enteró de la triste noticia “por televisión”.
“Me enteré muy mal. Era la mañana, justo había terminado de trabajar y una amiga que sabía donde trabajaba Marcelo me llamó y me dijo ‘hubo un ataque donde trabaja Marcelo, llamalo’. Yo lo llamé, sonaba, pero me cortaron varias veces”, explicó la mujer con la voz entrecortada y una angustia imposible de ocultar.
Preocupada, y con más dudas que certezas, envió un mensaje al teléfono celular de su marido para contactarlo por esa vía, pero nunca pudo concretar la comunicación. “Para mí, él no era Marcelo, era ‘amor mío’. Le mandé un mensaje diciéndole ‘amor mío, por favor sé que pasó algo, llamo y me cortás, decime que estás bien’”, recordó en diálogo con DNews.
“Obviamente, cuando pasó eso ya estaba muerto. Murió en el momento Marcelo. Le tiraron tres tiros en el pecho, a corta distancia, y no sufrió”, reveló.
Tras el atentado en territorio israelí, eran muchas las versiones que circulaban por los medios de comunicación y las distintas redes sociales. En ese contexto, Marcela supo por la televisión que había “tres heridos graves”, pero al poco tiempo el escenario cambió drásticamente.
“Yo me enteré por televisión de que había tres muertos, no estaba segura de que era Marcelo. Yo tenía la esperanza de que no fuera”, dijo.
En medio de la desesperación, Marcela supo por intermedio de sus hijos, y la primera esposa de Marcelo, que su marido había sido trasladado en helicóptero a un hospital de Jerusalén. Sin pensarlo un segundo, se subió a su auto y manejó una hora hasta la ciudad capital de Israel. Pero al llegar la desazón fue total. “Yo, con la esperanza de que todavía estuviera vivo, manejé una hora hasta Jerusalén. Por un lado, con angustia y, por otro lado, con la esperanza de que estuviera vivo. Cuando llegué al hospital me encontré a Miriam, la primera esposa de Marcelo. Obviamente, él no estaba en el hospital”, lamentó Marcela.
Mientras se encontraba en Jerusalén, la mujer recibió un llamado determinante. Del otro lado del teléfono no le confirmaban si su esposo se encontraba con vida o había fallecido en el ataque armado, pero su instinto le decía que algo no estaba bien. “Me llamaron de acá, de Ariel -un asentamiento israelí ubicado en la Gobernación de Salfit, en Cisjordania-, donde vivíamos juntos hace más o menos 2 años, y me dijeron ‘volvé a casa’. Cuando me dijeron eso les pedí ‘díganme si pasó algo’, pero me respondieron ‘si pasó algo no te lo vamos a decir por teléfono’. Pero yo ya sabía...”, recordó.
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Mientras atraviesa el duelo por la pérdida de Marcelo, la familia del argentino-israelí asesinado en el paso fronterizo de Allenby reclama a las autoridades locales que brinden más detalles de lo ocurrido. “Es una situación casi imposible de vivir. Tanto mis hijos como los hijos de Marcelo están destrozados. Queremos saber lo que realmente pasó. Cada día nos enteramos un poquito más. Viene gente que trabajaba con él, gente que estuvo ese día. Cada uno cuenta otro pedazo de lo que pasó”, concluyó la mujer.
En diálogo con la misma señal de noticias, Miriam Castro Padzamczer, hermana de la víctima, comento: “Marcelo era un ser de luz, todo el tiempo se reía. En Argentina animaba fiestas infantiles, hacía juegos de magia. Tenía mucha humildad. Acá llegó y tuvo muchos trabajos. Desde 26 de marzo de 2003 que vivía en Israel”.
“Sus mejores momentos de vida los tuvo en Israel, porque el país nos abrió las puertas. Los argentinos que vivían acá se hicieron familia y nos brindaron todo. Marcelo se hacía querer en todos lados porque hacía chistes y hacía juegos de magia”, comentó también sobre su hermano mayor.
Podzamczer, de 57 años, fue asesinado junto a Yohanan Shchori (61) y Yuri Birnbaum (65), ambos colonos de los asentamientos cisjordanos de Ma’ale Efraim y Na’ama el pasado domingo, cuando un terrorista se bajó de un camión y abrió fuego contra las personas que estaban trabajando en el lugar.
El atentado ocurrió a las 10:30, hora local, cuando un terrorista se acercó a la zona del puente Allenby (al norte del Mar Muerto) desde Jordania en un camión. Se bajó del vehículo y abrió fuego contra las fuerzas de seguridad israelíes que operaban en el puente y los civiles que estaban allí, según indicó el Ejército israelí en un comunicado.
El terrorista fue identificado como Maher Dhiab Hussein al-Jazi, de 39 años, originario de la ciudad de Udhruh, al sur de Jordania.
Marcelo tenía cuatro hijos, de los cuales uno de ellos, Sebastián, sobrevivió al sangriento ataque en el festival de música electrónica del pasado 7 de octubre, cuando el grupo terrorista de Hamás secuestró y masacró a cientos de israelíes, en el marco del sorpresivo ataque a Israel.
<La víctima del atentado terrorista será homenajeado este jueves, a las 18, en la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA).