El nivel del mar aumenta en el mundo: pronostican inundaciones hasta en la Ciudad de Buenos Aires. Se calienta la temperatura del océano, hay pérdidas de especies y no en el año 7.000 sino que las consecuencias se viven como si fuese un reality de la propia extinción. Pero eso no es todo, por otro lado, y en forma creciente, circula con más y más fuerza, una corriente que busca generar conciencia y educación para, desde el lugar que cada uno ocupa en el mundo, poder hacer algo por el mar. Eso incluye desde conocer las consecuencias de un consumo desmedido de plásticos hasta acompañar medidas como la creación de áreas marinas protegidas, conocer la necesidad de vedas en la pesca y tener otro vínculo con el mar en la playa.
Todo esto que está sucediendo con el “gigante azul” también sucede en el Patagonian Eco film Fest (PEFF), uno de los festivales de cine ambiental más importante del país. “El océano es uno de los temas primordiales dentro de la programación y la participación que tiene en el festival creció muchísimo. Estamos muy contentos en ese sentido”, explica Cristian Perez Scigliano, co-director del festival y completa: “Desde el primer año tenemos la sección ‘Patagonia en foco’ y cuando empezamos llegaban muy pocas películas que tenían que ver con temas de la región, hoy es casi más importante que la sección internacional”.
El PEFF se lleva a cabo en Puerto Madryn y después realiza una peregrinación por distintos puntos del país. En esta novena edición se podrán ver más de cuarenta películas no solo en la bella ciudad de las ballenas, sino también en forma online. Para comenzar, el jueves se inaugura el festival con Ojos al Mar, un film que indaga la presencia de plástico en el océano y cuenta qué se puede hacer al respecto. “La idea del festival es poder trabajar en educación ambiental y encontrar un espacio de difusión de películas que difícilmente llegan a los canales de distribución convencionales. El festival fue creciendo conforme con los años y con la agenda. Siempre tratamos de buscar nuevos temas y estar actualizados en los temas que tienen que ver más con nuestra coyuntura”, explica Cristian Scigliano. Un ejemplo de esto puede ser el film Pyrifera, producida por la fundación “Por el Mar”, que relata una expedición científica en Monte León, Santa Cruz, un área que a nivel provincial fue creado como Parque Marítimo y que se espera que sea avalado en el Congreso de la Nación. Este documental, que integra la sección “Patagonia en Foco”, posee imágenes impresionantes de los bosques de macroalgas, un ecosistema que se encuentra en peligro en todo el planeta y que Santa Cruz y Tierra del Fuego tienen los últimos en estado virgen de todo el globo.
Pero esas no son las únicas propuestas del festival vinculado al mar, también está Ella, el agua, donde un buceador profesional y director de cine submarino explora la filmación de individuos comunes bajo el mar para generar conciencia sobre un mundo que rara vez se ve, o ¿Y qué culpa tiene la gaviota?, donde se relata la problemática de la Península Valdés sobre los efectos de los implacables y feroces ataques de las gaviotas. La película investiga la causa de esta amenaza, el impacto que está teniendo en la especie y qué se está haciendo para resolver el problema. Al mismo tiempo, también se puede participar con la post producción de Matriarcas del océano, un film que se propone documentar la pasión con la que un grupo de mujeres se relacionan con orcas que luchan cada día por sobrevivir en un planeta cambiante.
Más allá de la temática marina, el Festival posee mucho contenido ambiental en general. No solo atraviesan las principales problemáticas vinculadas a los recursos naturales, sino también singulares historias que para muchos podrán ser desconocidas, como el negocio de los elefantes en cautiverio, la vida en un paraje perdido de la Patagonia o la historia de un hombre que viaja con tres mulas y lucha por mantener su estilo de vida nómada en el oeste de Estados Unidos. El PEFF cuenta con veinte documentales internacionales, de países que van desde Colombia, Alemania, el Reino Unido, Chile, entre otros.
El Festival Internacional de Cine Ambiental de la Patagonia se realizará de manera presencial en la ciudad de Puerto Madryn, con proyecciones en el Cine Teatro Auditorium y en el Teatro del Muelle. Además contará con proyecciones virtuales a través de la plataforma On Demand del Goethe Institut dentro del territorio nacional y a través del canal de YouTube para todo el mundo.
En un momento donde la agenda ambiental está relegada, este tipo de festivales vuelve a poner al cine en el lugar de herramienta política. Cada película busca mostrar algo, transmitir un mensaje y motivar a cada persona a ser parte del cambio que el planeta necesita. En otras palabras, pretende generar comunidad para enfrentar uno de los mayores desafíos de esta época: dejar de ser espectadores de la extinción para hacer posible un mundo sostenible.