Un joven oriundo de La Plata fue baleado en México cuando regresaba a su vivienda. El proyectil se alojó en una de sus piernas y debe ser operado de forma urgente. Como no es ciudadano mexicano, no podrá ser intervenido allí; por esto mismo, la familia reúne fondos para que el joven regrese al país y se realice la cirugía en Argentina.
Se trata de Nahuel Alejandro Tagliaferro, de 25 años, quien actualmente reside en Playa del Carmen. Todo sucedió el 21 de agosto, cuando Tagliaferro regresaba a su vivienda y pasó frente a un bar donde se generaron disturbios.
De un momento a otro, el platense quedó en medio de un tiroteo y fue herido de bala en su pierna izquierda. Además, otro proyectil impactó en su pie derecho. Afortunadamente, la herida tiene un orificio de salida. Él fue el único herido. En el lugar, el joven fue asistido por médicos que luego lo trasladaron hacia el hospital más cercano.
Según el medio local 0221, el tiro que recibió en su pierna le provocó una fractura múltiple en el fémur, pero su cuadro se agravó con el correr de los días, puesto que le provocó una aneurisma en la rodilla. Por este motivo, necesita ser operado de manera urgente.
Sin embargo, dada su situación migratoria, el joven no puede ser intervenido en México. En este contexto, la familia organiza una colecta para reunir los fondos necesarios para costear los gastos del traslado.
“Él no puede viajar solo, así que hay que ir a buscarlo o tiene que venir con alguien, y es un viaje de mucho dinero. Nosotros no tenemos recursos para un viaje así, entonces se nos ocurrió hacer una colecta para poder traerlo”, explicó Jonathan, tío del joven. En este contexto, apelaron a la solidaridad de las personas para que Nahuel pueda regresar al país y ser intervenido.
Tagliaferro reside en México desde hace cinco años. En un primer momento, vivía en Querétaro y, desde hace un tiempo, trabaja como chef en un restaurante de Playa del Carmen.
La noticia llega luego de que se confirmara la muerte del joven cordobés que se había contagiado de la viruela del mono y que permanecía internado desde hacía un mes y medio en el hospital de Playa del Carmen.
Santiago Molino tenía 28 años y era oriundo de La Calera, Córdoba. La muerte fue confirmada por su madre, Claudia Follin, en un breve mensaje. “A todos los amigos y conocidos de Santy queremos comunicar que ha fallecido lamentablemente. Siempre estará en nuestro corazón”, escribió.
La salud de Molino se debilitó luego de padecer reiteradas fallas multiorgánicas, producidas por el virus. “Se broncoaspiró, colapsó uno de sus pulmones y fue a terapia con intubación”, precisó la tía Eugenia Follin, a Eldoce.tv.
De acuerdo con su relato, el cuerpo de Santiago no será repatriado por lo costoso que es el trámite. Frente a esto, la familia decidió hacer una misa para despedir sus restos y cremarlo para luego traer sus cenizas al país.
“Traerlo es imposible porque cuesta mucho”, expresó, y precisó que la cremación cuesta unos 450 dólares —cerca de 600.000 pesos—. Si bien el costo es mucho menor que la repatriación, familiares y amigos de Santiago juntan dinero para el último adiós.
Tal como había contado días atrás la propia Claudia en diálogo con distintos medios de comunicación, Santiago comenzó a notar los primeros síntomas compatibles con la enfermedad durante los primeros días de agosto, pero su madre relató que el cuadro empeoró unos 10 días después. “Está internado hace 10 días y se ha complicado todo lo que es su sistema respiratorio, su parte pélvica, genital y otras zonas más”, describió. En las semanas previas a su fallecimiento, estuvo conectado a una sonda pulmonar y a sondas pélvicas para tratar las infecciones asociadas.