Luego de que se pronosticara la llegada de un nuevo proceso de ciclogénesis para este miércoles, desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) explicaron que el fenómeno se desarrollará en algunas provincias del centro y norte del país. Sin embargo, desmintieron que los efectos que estos pudieran representar algún tipo de peligro para la ciudadanía. De qué trata, por qué se produce y qué provoca el evento climático.
A raíz de las alarmas que se encendieron a principios de agosto por la manifestación climatológica en el sur de la provincia de Buenos Aires, el organismo expuso los motivos por los que el hecho no debería ser el motivo de angustias y/o preocupaciones. “El término se utiliza en meteorología para referir al proceso que origina una baja presión, y nada más que eso”, aclararon al remarcar que esta clase de sistemas son comunes en el país y que, por lo general, se desplazan de oeste a este.
Pese a que de manera universal el fenómeno está relacionado a circulaciones ciclónicas que se desarrollarían en una zona de baja presión y que podrían anteceder a huracanes, tifones, borrascas, bajas polares y otro tipo de eventos climáticos, los expertos subrayaron que en el país solamente suele provocar lluvias y ráfagas. Sin embargo, apuntaron que no siempre el paso de la ciclogénesis supondría que otros fenómenos se generen en el territorio.
En esta oportunidad, indicaron que el evento comenzará entre el miércoles y el jueves en las cercanías de las costas uruguayas y el sur del Litoral. A partir de ahí, está previsto que la ciclogénesis se dirigirá hacia el sudeste, se profundizará sobre el océano Atlántico, pero no llegará a ingresar al continente.
El hecho de que el proceso no se producirá sobre nuestro país, el climatólogo del SMN, José Luis Stella, manifestó durante una breve conversación con Infobae que “ya se observa que se formará un sistema de baja presión. No hay que alarmarse”. Al mismo tiempo que explicó que “el proceso se debe al avance de un importante frente frío”, adelantó que “nevará en la meseta patagónica. No se descarta que pueda haber algún evento de nieve en la zona serrana de la provincia de Buenos Aires”.
Desde el miércoles “se va a experimentar un marcado descenso de la temperatura, luego de que se registren lluvias y tormentas, especialmente en el Litoral, donde la masa de aire es bastante cálida hoy”, mencionó Stella. Entre viernes y domingo se esperan temperaturas más bajas.
Como consecuencia de la ciclogénesis, este miércoles se esperan lluvias persistentes en el este de Río Negro y varios sectores de Buenos Aires y el Litoral; tormentas fuertes en Entre Ríos, Corrientes, este de Chaco y Santa Fe; y ráfagas de viento que alcanzarán los 50 km/h en la Costa Atlántica.
Por otro lado, otras 11 provincias estarán bajo alerta amarilla por lluvias, tormentas, vientos y nevadas respectivamente. En el caso del este de Río Negro y el sur de bonaerense que limita con este sector regirá una advertencia por lluvias que podrían comenzar durante la madrugada.
En gran parte de Entre Ríos -a excepción del suroeste-, la mitad oeste de Corrientes, el noreste de Santa Fe y el sur de Chaco se pronosticaron fuertes tormentas que podrían variar de intensidad a lo largo de la jornada. Asimismo, el panorama podría estar acompañado de ocasional caída de granizo, ráfagas intensas, actividad eléctrica y una acumulación de agua de entre 40 y 80 milímetros.
Más al norte, el oeste de Jujuy, Salta, Catamarca y La Rioja fueron advertidos por la presencia de fuertes vientos que ganarían una velocidad de entre 60 y 75 km/h que podrían combinarse con ráfagas de viento superiores a los 110 km/h. Finalmente, la cordillera de Mendoza se verá afectada por fuertes nevadas que podrían dejar una acumulación de nieve de entre 30 y 50 centímetros, aunque plantearon la posibilidad de que los valores pudieran ser superados.