Hoy, 25 de julio, la Madre de Ciudades conmemora un nuevo aniversario de su fundación y celebra dos importantes distinciones otorgadas este año por el papa Francisco: ser designada como la Diócesis Primada de Argentina y la canonización de la primera santa argentina, Mama Antula, una hija de esta tierra santiagueña.
El pasado 22 de julio, en un acto de reparación histórica, el Papa confirió mediante una Bula el título de Diócesis Primada a Santiago del Estero. Este reconocimiento, tal como destaca el Sumo Pontífice, representa un gesto de atención hacia el interior profundo del país, fundamental en la evangelización.
El papa Francisco y un acto de reparación histórica
El arzobispo de Buenos Aires, Monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, y el obispo de Santiago del Estero, Monseñor Vicente Bokalic Iglic, emitieron un comunicado en conjunto el pasado lunes para hacer pública la decisión de Francisco de trasladar la Sede Primada de la Argentina a Santiago del Estero. La Bula Pontificia que ordena el traslado se ejecutará en Buenos Aires el domingo 25 de agosto y en Santiago del Estero el sábado 7 de septiembre.
La costumbre de otorgar el título de diócesis primada a la sede episcopal más antigua se observa en varios países con una fuerte tradición católica. Sin embargo, en Argentina no fue otorgada a Santiago del Estero, sino a Buenos Aires, que recibió este título por decreto de la Sagrada Congregación Consistorial el 29 de enero de 1936, durante el papado de Pío XI. La razón principal de esta decisión fue que Buenos Aires era el primer arzobispado del país, aunque no la primera diócesis en el territorio argentino. La denominación de diócesis primada es honorífica y no confiere ninguna autoridad de régimen o gobierno sobre otras diócesis, según el Código de Derecho Canónico.
La primera diócesis del territorio argentino
La primera diócesis establecida en el territorio que hoy corresponde a Argentina fue la Diócesis del Tucumán, que abarcaba una vasta región del noroeste argentino y tenía su sede en Santiago del Estero.
En 1653, el Gobierno del Tucumán era la entidad territorial integrante del Imperio español, que incluía gran parte del centro y noroeste de la actual Argentina y Santiago del Estero. El Tucumán había sido separado de Chile en el fuero civil, pasando a depender de Charcas. Por lo que se pensó hacer lo mismo en lo relativo a lo eclesiástico.
El 14 de mayo de 1570, el papa San Pío V dictó la bula Super Specula Militantis Ecclesiae erigiendo la diócesis del Tucumán como dependiente de Lima y estableció que la ciudad de Santiago del Estero sería sede episcopal y su catedral la primera del país.
En la sede de Santiago del Estero residieron nueve obispos. El primero de ellos fue el dominico fray Francisco de Vitoria, que permaneció desde 1581 hasta 1596. Francisco de Vitoria fue conocido por impulsar audaces y fructíferas iniciativas comerciales, acelerando así la evangelización en la zona y el desarrollo económico de la provincia santiagueña. Vitoria también fue quien introdujo a los jesuitas en Santiago del Estero.
La primera diócesis tuvo su sede en la ciudad de Santiago del Estero hasta 1699, es decir que permaneció por 200 años aproximadamente, y luego fue trasladada a la ciudad de Córdoba por el obispo dominico fray Manuel Mercadillo, según estableció del papa Inocencio XII. (*)
Cabe destacar que Santiago del Estero, además de ser “Madre de Ciudades”, debería ser considerada también “Madre de la Educación”, patrona de los estudios superiores en la Argentina y origen de las Universidades de nuestro país, ya que el Seminario Santa Catalina Virgen y Mártir - fundado en 1609 en Santiago del Estero - dio origen a la educación superior en Argentina.
Esta iniciativa que concreta hoy el papa Francisco ya había sido manifestada por él cuando era arzobispo de Buenos Aires en un viaje a Santiago del Estero en el año 1999. En esa oportunidad definió como “una injusticia” el hecho que Santiago del Estero no fuera diócesis primada de la Argentina. Y el pasado 10 de febrero, en una audiencia en el Palacio Apostólico del Vaticano, el Santo Padre adelantó a las autoras de este artículo esta decisión expresando: “A ver cuándo Santiago del Estero vuelve a ser la Diócesis Primada de Argentina”.
Este reconocimiento realizado por el Papa refleja la importancia histórica y simbólica de Santiago del Estero dentro de la estructura eclesiástica de Argentina.
(*) Fuente. José. N. Achával. Historia de la Iglesia de Sgo del Estero: S. XIX y XX. Ediciones UCSE, Santiago del Estero, 1993.