El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires -a cargo de Jorge Macri- proyecta la construcción de cinco nuevos pasos bajo nivel, los cuales se sumarán a los 29 que ya existen en la Capital Federal. Dos de los proyectos se encuentran en proceso de audiencia pública, mientras que la licitación de los otros tres será lanzada en las próximas semanas, según comunicaron las autoridades porteñas.
Uno de ellos es el paso bajo a nivel Larrazábal, en el barrio de Villa Lugano y correspondiente al recorrido que realiza el ferrocarril Belgrano Sur.
Ya en proceso licitatorio, será en un solo sentido de circulación con dos carriles más la banquina. De acuerdo a lo que comunicaron desde el Ministerio de Infraestructura, conducido por Pablo Bereciartua, una vez finalizado éste túnel se continuará con el paso bajo nivel Cafayate, otras de las obras planeadas a futuro.
Desde el Gobierno porteño destacaron que 29 mil vecinos se verán beneficiados con esta obra, la cual constará de 2 carriles con un sólo sentido y sumará escaleras y rampas para cruces peatonales.
El barrio de Caballito tendrá su primer túnel del tren Sarmiento con el paso bajo nivel Federico García Lorca, una obra cuya licitación se lanzó el pasado 27 de mayo.
En particular, este proyecto consiste en realizar esta infraestructura sobre la calle Lorca, a pocos metros de la avenida Rivadavia y muy cerca de la estación Caballito, correspondiente al ferrocarril que comunica la Capital Federal con el oeste de la provincia de Buenos Aires. “La obra mejorará la circulación y reducirá notablemente los tiempos de espera”, subrayaron desde la cartera que dirige el ministro Bereciartua.
En números, el PBN Lorca, que consta de un carril con sentido sur norte y de 3,50 metros de ancho, beneficiará a más de 55 mil vecinos y también tendrá más escaleras y rampas para cruces peatonales. La velocidad máxima de circulación será de 40 kilómetros por hora, y sólo podrán pasar por allí los vehículos que midan hasta 4,30 metros de alto.
Además se intervendrán las veredas y las calles y se realizarán nuevos espacios públicos con áreas de descanso, espacios verdes y equipamiento urbano.
A cargo de la empresa AUSA, se espera que esta obra demande 17 meses y se estima que su inauguración sea a principios del 2026.
El proyecto Ramallo-Correa propone dos pasos bajo nivel que se ubicarán en el barrio de Núñez, aproximadamente a 300 metros de la estación Rivadavia del tren Mitre y sobre la intersección de las calles homónimas con el ferrocarril que une las cabeceras Retiro y Tigre.
Se extiende entre las calles Grecia y 11 de Septiembre de 1888, y de forma complementaria está contemplada la construcción de un nuevo espacio verde de alrededor de 1.000 m2, con lugares recreativos y de descanso.
Los pasos de las calles Ramallo y Correa tendrán un carril de 4,50 metros de ancho cada uno, y contará con calzadas colectoras de convivencia a cada lado, lo cual permitirá el ingreso a los vecinos de las propiedades frentistas.
Actualmente la calle Ramallo funciona con doble sentido de circulación, cruza a nivel sobre las vías del tren Mitre ramal Tigre y funciona como nexo entre las avenidas Del Libertador y Cabildo. Con esta intervención, el Gobierno porteño busca la eliminación de la totalidad de los pasos a nivel de la línea.
Debido a que la distancia entre líneas municipales de la calle no permite materializar pasos bajo nivel direccionales, los mismos funcionarán como par vial: el de Ramallo será con sentido avenida Del Libertador-avenida Cabildo, mientras que el de Correa será para circular en dirección av. Cabildo-av. Del Libertador.
En esta etapa, el último paso bajo nivel proyectado es el de Irigoyen, en el barrio de Villa Luro. También bajo las vías del tren Sarmiento, este túnel estará ubicado sobre la calle homónima, entre las calles Yerbal y Bacacay, que tiene doble sentido de circulación y funciona para comunicar la primera de las trazas mencionadas con la avenida Juan B. Justo, dos de las principales arterias urbanas de CABA.
En la actualidad, sobre la calle Irigoyen existe un cruce vehicular a nivel que provoca importantes demoras y focos de congestión vehicular.
Se estima que este paso bajo nivel con doble carril de circulación beneficiará a más de 6.700 vehículos diarios y a 6.800.000 de pasajeros del ferrocarril mensuales.