El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires realizó hoy un operativo para evitar que manteros se instalaran en el Parque de los Patricios, en donde organizan una feria todos los sábados y domingos de 9 a 21 horas. La intervención para despejar la zona, que comenzó a las 5 de la mañana, se ejecutó con equipos técnicos, de higiene y dos camiones hidrogrúa.
Según confirmaron desde el GCBA, no hubo detenidos. Participaron del trabajo en conjunto inspectores de la Dirección General de Fiscalización, 80 efectivos de la policía y la Agencia Gubernamental de Control contra la venta ilegal y la ocupación del espacio público.
“Este fenómeno de los manteros empezó hace un tiempo, arrancó como casual y después apareció una organización muy importante, muy fuerte”, indicó el jefe de gobierno, Jorge Macri. Y agregó: “Acá llegaron a haber 2.500 manteros, una cantidad preocupante que generaba mucha incomodidad entre los vecinos, porque cuando se ocupa el espacio público hay alguien que lo sufre. Por eso el espacio público no es negociable”.
En esa línea, desde el ejecutivo porteño aseguraron que este operativo se debe sostener en el tiempo, y que el objetivo es seguir ordenando los espacios públicos. Por ejemplo, en febrero de este año se desalojó una feria ilegal que se realizaba en la calle Carlos Perette, una de las entradas al Barrio 31, y en marzo se realizó otra intervención con los manteros ubicados en las veredas de la estación Constitución.
Acompañado por el ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi, Macri concluyó que quienes comercian en el espacio público deben hacerlo dentro del marco de la ley: “Nuestro objetivo como gobierno es garantizar la transitabilidad, la libre circulación y el orden en una ciudad con las mismas oportunidades para todos”.
Algunos de los manteros que se instalan en Parque Patricios llegan la noche anterior a los alrededores del parque para guardar su espacio, mientras que otros escriben sus nombres en el suelo y marcan los rectángulos que van a ocupar. Entre los artículos que se pueden encontrar hay ropa de primera y segunda mano, calzado deportivo y de vestir, juegos de sábanas, toallas, toallones y frazadas.
También se comercializan frutas, verduras, gaseosas de primeras y segundas marcas, tortas, empanadas y sándwiches, así como elementos de limpieza, herramientas, juguetes y electrónicos.
La venta informal incluye la vereda de las calles Monteagudo y Patagones, donde se encuentra la Estación Saludable y toda la superficie ubicada en el playón de ingreso a la estación de subte de la línea H. Según reporta la Ciudad, inclusive la rampa de acceso al ascensor y las rejas perimetrales del parque se utilizan como exhibidores para la venta informal, y los vecinos del barrio reclaman el no poder caminar por las veredas ocupadas.
Un antecedente en Constitución
En marzo de este año el gobierno porteño desalojó a más de 200 manteros que vendían mercadería en las veredas del barrio de Constitución. El operativo se llevó a cabo en el sector de las calles General Hornos, Lima, la Avenida Juan de Garay, Salta y O’Brian. La intervención incluyó acciones de limpieza y de puesta en valor del área.
Desde hace años las inmediaciones de la estación de trenes es sitio de venta de alimentos, bebidas, indumentaria y artículos de electrónica. De acuerdo con Macri, las personas que fueron desalojadas instalaban sus puestos todos los días, algunos con mantas en el piso y otros como vendedores ambulantes no habilitados. “Todo eso muchas veces esconde detrás el accionar de redes que los utilizan para la venta ilegal o para la venta de cosas robadas”, opinó.