A la histórica escalada de brote de dengue en el país, con más de 151 mil casos confirmados y 106 fallecimientos a nivel nacional, se suma otro dolor de cabeza para combatir este flagelo que día a a día se mete más en la problemática familiar: conseguir repelente.
Tanto sea en grandes cadenas comerciales como en negocios de cercanía, hacerse de un spray, crema o hasta espiral puede convertirse en una tarea titánica en plena epidemia de mosquitos a nivel nacional. Como si fuera poco, los pocos productos que están disponibles se comercializan -especialmente en sitios de internet- a precios ridículamente exorbitantes.
El Ministerio de Salud de la Nación actualizó los datos sobre la incidencia del dengue, la enfermedad viral transmitida por el mosquito Aedes aegypti, en Argentina. En lo que va de la temporada 2023/2024, de la semana 31 de 2023 -fines de julio y comienzos de agosto- hasta la semana 11 de 2024 -mediados de marzo- se registraron 151.310 casos de dengue, de los cuales corresponden a este año.
Por eso, ante esta creciente demanda, los establecimientos comerciales enfrentan dificultades notables para mantener en stock productos como aerosoles, espirales, y cremas repelentes. Las firmas reconocidas tales como Off, Fuyi, Raid, etc desaparecen de las estanterías en minutos y solo se encuentran alternativas de marcas menos conocidas. O a precios altísimos.
“Desde el miércoles pasado no estamos recibiendo nada”, le dijo un repositor del Jumbo San Martín a Infobae mientras una vecina con cara de disgusto enfilaba hacia la salida al saber el resultado de la infructuosa búsqueda. “La semana pasada fue lo último en repelente que nos enviaron y voló, no sabemos cuándo vamos a reponer mercadería, es más, en la farmacia tampoco hay”, completó la responsable de atención al cliente ante la desazón de quienes se acercaban a las 8:30 al centro comercial por un spray o crema.
Vale recordar que en el mercado se pueden identificar tres tipos de repelentes: las cremas, los aerosoles y los spray. Las cremas tienen una efectividad plena de cuatro horas en promedio, por su parte, los aerosoles de color naranja tienen una efectividad de 8 horas mientras que los de color verde su durabilidad aumenta a 12 horas. Por su parte, los spray tienen una duración promedio de 8 horas, pero actualmente es muy difícil conseguirlos.
Durante el domingo por la noche, en una góndola de una cadena de supermercados como Carrefour, en el barrio porteño Villa Urquiza, en materia de repelentes sólo se ofrecía el líquido termoevaporable marca Fuyi, de la empresa SC Johnson. No habían aerosoles, ni espirales, ni tabletas, ni producto similar.
En el Jumbo de Villa Ballester durante esta mañana también sólo había disponible este “líquido eléctrico” contra mosquitos y zancudos (marca Raid a 4800 pesos con el aparato incluido) que solo tienen efectividad en el ámbito familiar interno. Pero a la hora de salir a la calle, los transeúntes tienen que protegerse como pueden de los insectos transmisores del dengue.
Vale aclarar que varias góndolas ya venden un producto por grupo familiar o hasta dos ante la evidente demanda.
Este producto líquido, contra mosquitos y zancudos, según el envase, ofrece una protección por 45 noches pero para utilizarlo, por ejemplo, hay que contar con el dispositivo de enchufe a la red eléctrica. El valor de este producto oscilaba los 3500 pesos.
En material de uso personal, encontrar productos en aerosol a precio razonable parece tarea imposible. De poco sirve recorrer supermercados “chinos” en donde los productos en aerosol y crema ya desaparecieron en su mayoría y sólo queda la opción de caer en las plataformas online. O haberse stockeado con anterioridad. Un Off de 170 cm3 es ofrecido Mercado Libre a un precio base de 9500 pesos, y otros como Fuyi por 4500 pesos.
Ante los altos precios y en medio de la crisis, muchas familias que históricamente compraban productos para protegerse de las infecciones transmitidas por mosquitos suspendieron directamente la búsqueda. “Los repelentes están cada vez más caros, la invasión de mosquitos no termina más y en este contexto tengo que priorizar mis ingresos para comprar alimentos y otras cosas que necesitamos en la casa”, se escucha a menudo.
Este flagelo que día a día comienza a sentirse más en el país tiene su correlato en diferentes provincias. En Córdoba, por ejemplo, desde el Colegio de Farmacéuticos de la capital indicaron que la demanda de los aerosoles y cremas para ahuyentar mosquitos está saturada. Según informó Diego Miranda, a Eldoce.tv, el problema es que la dificultad para conseguir los recipientes de aluminio en los cuales se envasa el producto hace aún más lento el abastecimiento de estos productos.
Tanto en farmacias como almacenes y supermercados los aerosoles son los primeros productos en agotarse quedando como segunda opción la utilización de cremas para el cuerpo. Según las fuentes consultadas por medios locales, en materia de precios, también evidenció variantes: a comienzos de la semana pasada estaba saliendo alrededor de los $2.800 una crema grande y subió a los $3.600. Un aerosol que estaba en los $3.000 o $3.500, se fue a $4.000 o $4.500. Esto recién empieza.