Este sábado 23 por la noche y el domingo 24 de marzo se celebra Purim, la fiesta más alegre de la comunidad judía.
Purim proviene del plural hebreo de la voz persa Pur que significa suerte y refiere a la fecha elegida para que la destrucción fuese echada al azar y cambiase la fortuna del pueblo judío. A partir de la Edad Media la comunidad acostumbra a representar esta hi como Purim Shpil y de esta tradición ha derivado en el festejo como un carnaval.
La comunidad festejará este fin de semana para recordar la salvación del pueblo hebreo ante el riesgo de aniquilación en Babilonia. La misma se rememora a través de la lectura del libro de Ester.
Dónde festejar Purim
La organización Jabad Argentina ofrece una variedad de opciones para escuchar la historia de Ester y recibir Mishlóaj Manot. Habrá lecturas de la Meguilá en espacios públicos y en Agüero 1164. Toda la información, puntos de encuentro y horarios se encuentran en purimargentina.com.
El domingo 24 en avenida Pueyrredón y Tucumán, y en Corrientes y Scalabrini Ortiz, de 11 a 18 horas, habrá espacios de encuentro para recibir Mishlóaj Manot y cumplir las 4 mitzvot de la festividad con Purim en la Ciudad. En ambos puntos habrá lectura de la Meguilá a las 12 y a las 14 horas. También se podrá escuchar la historia de Purim el domingo a las 15 en espacios verdes: en la pérgola de Barrancas de Belgrano, en Plaza Castelli -Conde y Echeverría-, en Parque Centenario al lado del lago y en Plaza Alemania (avenida del Libertador y Scalabrini Ortiz). La propuesta es abierta para todo público y no requiere inscripción previa.
Otra opción será asistir a la lectura de Meguilá a cada hora en la planta baja de Agüero 1164, el sábado desde las 21 hasta la 1, y el domingo de 8 a 19 horas.
Si alguien no puede acercarse a los puntos de encuentro, por razones de enfermedad o por trabajo, puede completar el formulario en purimargentina.com para recibir la visita de un voluntario con Meguilá a domicilio. También pueden comunicarse por WhatsApp al 11.6197.4444.
Origen de la fiesta
La fiesta de Purim celebra la salvación del pueblo judío de su total exterminio en manos de los persas bajo el mandato del Rey Ajashverosh (Asuero) en el siglo 4 antes de Cristo.
Entre las costumbres predomina el regalo de alimentos a familiares y amigos y la donación a los más vulnerables y necesitados. En la sinagoga, durante la lectura del libro de Ester, se utilizan instrumentos ruidosos cuando suena el nombre del perverso Amán.
El libro de Ester narra como Asuero, manipulado por las difamaciones de su ministro Amán, decretó el final de la presencia judía en su tierra. De todos modos, la esposa de Asuero, la reina Ester, lo persuadió para que dejara sin efecto dicho decreto.
“Cuando parecía que no hay manera del punto de vista racional, del punto de vista política, del punto de vista natural de los acontecimientos. Ya que el Rey había firmado el edicto, el Primer Ministro, un acérrimo antisemita, estaban totalmente abocados a este diabólico plan. Y sin embargo, los judíos fueron milagrosamente salvados con la secuencia de muchos hechos que se fueron tejiendo a lo largo de los años”, afirma el rabino Tzvi Grunblatt.
“Hacemos un banquete festivo. Porque nuestra fuerza es más allá de lo que muestra la realidad, nuestra realidad tiene que ver con la realidad eterna. La realidad de la bondad eterna, la justicia eterna, la bondad de Dios en la cual confiamos y sabemos que saldremos airosos. Feliz Purim para todos”, finaliza el rabino.