A Melisa Barberón le gusta correr. Cuando lo hace no hay nada más importante en el mundo. Pone todo de sí para llegar a cada meta, para la que se prepara con esfuerzo y disciplina. En el último marzo compitió en un torneo que se realizó en Chaco y en otro certamen internacional, el Américas “Tri 21″, que se celebró en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Cenard) de Buenos Aires. En la competencia, obtuvo la medalla de oro en 100, 200 y 400 metros llanos, y estableció el récord mundial en posta 4×100. En octubre, la Federación Argentina de Deportes para Atletas con Síndrome de Down (FADASD) la convocó para representar al país durante las olimpiadas Trisome 21 que se realizarán en Turquía en marzo de 2024.
“Es una atleta muy esmerada, le gusta competir y entrenarse”, cuenta Alicia, su mamá y la define: “Es una dulce. Su llegada fue una bendición en nuestras vidas”, asegura la mujer que la dio a luz a sus 33 años.
La joven trabaja desde hace 9 años en la municipalidad de Río Tercero y dedica todas sus tardes a entrenar en el Polideportivo Municipal. “Es admirable cómo se dedica a la disciplina, por eso ahora sueña con la posibilidad de representar a la Argentina en Turquía”, dice la mujer.
Aunque Alicia no recuerda el año exacto, dice que ya desde muy chica a su hija le gustaba practicar deportes. “Comenzó en 2017 con natación y siguió con atletismo, y ahí se quedó. Quien la ayudó mucho en ese descubrimiento es su entrenadora, Blanca Castillo, creo que es la persona más importante en su formación como atleta y quien la acompaña en cada competencia. Cuando viajan se convierte en su madre”, agradece.
“Ese mismo año, la profesora la llevó a participar de un torneo de natación en Colombia. Al mismo tiempo comenzó con el atletismo y decidió quedarse ahí porque ama correr. Por eso le dedica todo el tiempo necesario. En etapa de torneo, entrena en doble turno”, agrega y recuerda que hace solo un año se dedica de lleno a correr.
El inicio se dio en noviembre de 2022 cuando Melisa viajó a Pergamino, en Buenos Aires, para probarse y quedó entre los cinco primeros puestos en posta y trajo el récord mundial de posta de 4x100 metros. “Desde ese momento, forma parte de la Selección Nacional de Atletismo de la Federación Argentina de Deportes para Atletas con Síndrome de Down”, cuenta.
Toda la familia hace fuerzas para que Melisa logre el sueño de viajar a Turquía, pero desde que comenzó en el deporte la alienta para encarar cada desafío.
“Ella es muy segura de sí misma. Sabe del potencial que tiene y cada vez que compite lo hace muy confiada de todo lo que puede dar”, sostiene. “Nunca la vi nerviosa y tiene autonomía total en la pista, un desenvolvimiento social muy bueno con todo el grupo. Cuando queda como parte del Seleccionado Nacional evaluaron su desarrollo personal, el desenvolvimiento que tenía, su autonomía y fue justamente eso lo que le hizo sumar puntos para lograr esto”.
Sobre el viaje a Turquía y sus esperanzas de viajar, la familia le contó de qué trata. “Al momento de ser convocada, le explicamos que es un país que queda muy lejos, que no podemos viajar con ella, que era otro país, que eran otras costumbres, otro idioma, pero no se hizo problemas. Nos dijo ‘¡Yo puedo!’, sabe que puede sola, que tiene 31 años, y eso nos hizo entender también que sin dudas puede hacer lo que desee. Es muy decidida y quiere ir así que la vamos a ayudar”.
Además del deporte, ama ir a las fiestas que realizan de manera mensual para conocer personas. “No está en pareja y tiene una vida social muy linda. Sale con sus amistades, cuando los compañeros de trabajo la invitan a alguna reunión siempre va, y no se pierde los encuentros que hacen para personas con discapacidad. Le gusta mucho bailar y escuchar música”, agrega.
Tomando distancia en el tiempo que pasó y en los logros de su hija, Alicia dice: “Caigo en la cuenta de todos estos años cuando me cruzo a gente que lo ve de afuera y me dice que se acuerda de cuando era chica y que yo la llevaba a la escuela primaria, por ejemplo, de la misma manera que lo hice con mi otro hijo porque nunca hice diferencia entre ellos. A los dos los acompañé en la infancia, como en la adolescencia. Melisa nunca se sintió diferente en su casa ni entre sus amigos”, dice emocionada.
El viaje se realizará en marzo próximo y para costear los pasajes de Melisa y su entrenadora, que cuestan unos 6.000 dólares, además de la estadía la familia hace sorteos que se publican en el perfil de Instagram del hermano, mauribarbvrt. “En estos meses, seguramente tendrá que viajar con su entrenadora varias veces a Buenos Aires para entrenar con la Selección. En total viajarán 45 atletas de distintas disciplinas”.
La Federación, que es de Buenos Aires, está gestionando lo que le corresponde y le permitió a la familia, que al ser del interior de Córdoba tendrá otros gastos, que hagan su propia recaudación de fondos para que pueda viajar.