Convocados por la Unión Piquetera, organizaciones sociales y referentes de izquierda, cientos de manifestantes encabezan en la tarde de este miércoles la primera marcha contra el gobierno de Javier Milei para reclamar por las políticas económicas y sociales anunciadas desde su asunción, el pasado 10 de diciembre.
La movilización fue anunciada el jueves luego de que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, comunicara su protocolo antipiquetes, el cual busca impedir -entre otras cuestiones- los cortes de calles. “La marcha del 20 de diciembre se va a hacer”, reafirmaron dirigentes que desafiaron a la funcionaria tras su conferencia de prensa.
Tal como estaba previsto, la protesta comenzó a las 16 horas. No obstante, minutos antes de dar inicio a la jornada, los organizadores cambiaron el lugar de la cita: en vez de ser en el Congreso de la Nación, informaron que la cabecera central se ubicaría en Diagonal Sur y Belgrano.
Desde allí dieron inicio a su marcha hacia Plaza de Mayo, mientas una segunda columna hacia lo mismo por Diagonal Norte y otras organizaciones y organismos de derechos humanos desde el obelisco porteño.
Debido a las nuevas medidas adoptadas por el gobierno nacional para los piquetes, los dirigentes también decidieron no llegar a CABA en micros escolares, que ya estaban preparados ante la certeza que serían detenidos. En cambio, eligieron movilizarse en trasporte público: colectivos, trenes y subterráneos, pero sin remeras, palos para pancartas y mochilas con piedras, como solía ocurrir hasta ahora.
Belliboni y varios dirigentes de izquierda se pusieron en marcha pasada la una de la tarde. Antes, militantes de varios partidos y organizaciones de izquierda lo hicieron desembarcando, de grupos pequeños, en las estaciones de Avellaneda, Liniers, Retiro, Constitución y Once o Plaza Miserere.
Pocas horas después, ya eran cientos los piqueteros que se movilizaban en el centro porteño. El drone de Infobae registró la llegada de varios de ellos a Plaza de Mayo desde Diagonal Norte. En las imágenes se ve a militantes del MTS con banderas caminando sobre la vereda y por un solo cordón de la calle.
Los límites del espacio en el que marchan están delimitados por un cordón policial formado por agentes de la policía de la ciudad, quienes trabajan en el operativo en coordinación con el resto de las fuerzas.
El Ministerio de Seguridad nacional activó a las 8 de la mañana de este miércoles un mega operativo con el despliegue de todas las fuerzas de seguridad federales: Policía (PFA), Gendarmería, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). La intención, tal como lo manifestó la titular de la cartera, Patricia Bullrich, es hacer valer el protocolo antipiquete para garantizar la libre circulación de los ciudadanos: “Si bajan de la vereda, se activa”, anunció en las últimas horas.
Para eso, se dispuso la implantación de divisiones de cada una de las fuerzas en más de 20 puntos de acceso a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y, también, dentro de la Capital, especialmente en zonas de custodia de edificios del gobierno nacional, como el Congreso y Casa Rosada, que eran, originalmente, los puntos de partida y de llegada para la manifestación prevista para hoy, en conmemoración de los asesinatos cometidos -justamente por las fuerzas de seguridad federales- durante las protestas sociales del 19 y 20 de diciembre de 2001.
En las primeras horas de la mañana, los efectivos de Policía Federal comenzaron a subirse a las formaciones de los ferrocarriles y colectivos para identificar a los pasajeros.
No había encapuchados y no reaccionaron a insultos y frases como “comenzó la represión”, “comenzó la requisa militar de Macri y Milei”, “nos están filmando, esta es la represión de toda la derecha”. Los propios efectivos filmaban con celulares y cámaras GoPro corporales. Y, a pesar de las provocaciones, los pasajeros mostraron sus documentos y no hubo demorados.