Carolina Soledad Camaño, la joven cordobesa de 31 años que se encuentra internada en un hospital público de Playa del Carmen, México, tras sufrir un accidente cerebrovascular (ACV) al presenciar un crimen en la playa, sigue luchando por su vida.
En las últimas horas, sus familiares solicitaron la asistencia de las autoridades de la Embajada argentina en el país y decidieron iniciar una colecta en redes sociales para reunir los fondos necesarios para que sea operada de manera urgente.
Juan Pablo, uno de los hermanos de Carolina, ya está en Playa del Carmen para brindarle apoyo y seguir de cerca su hospitalización. “Mi hijo la encontró muy deteriorada, con los ojos extraviados, balbuceando, con la boca ladeada y con falta de atención”, relató este martes por la noche Juan Camaño, padre de la joven, en una entrevista con Telenoche.
El hecho sucedió el pasado domingo 26 de noviembre, cuando la mujer, oriunda del barrio San Vicente, permanecía en la playa. Allí fue testigo de un crimen, escena que la impactó y que, al regreso a la casa, le provocó convulsiones. Su cuadro se agravó con el paso de los días y, desde entonces, está internada en el hospital PlayaMed.
Tras ser hospitalizada, se descubrió que la joven tiene un aneurisma del tamaño de una pera, y se aguarda su traslado a la ciudad de Mérida, donde se le realizaría una cirugía importante.
Según explicó el padre de Carolina, la operación que requiere su hija tiene un costo aproximado de 20 mil dólares en un centro de salud público, una opción más accesible en comparación con una clínica privada, donde los gastos podrían ascender desde 60.000 hasta 100.000 dólares.
En este contexto, Camaño insistió en que su hija debe ser trasladada lo más rápidamente posible a otro hospital de alta complejidad, ya que el lugar en el que se encuentra internada carece del equipamiento necesario para llevar a cabo la intervención quirúrgica. “Apenas llegó mi hijo, se quedó todo el día esperando al neurólogo que tienen allí. Pareciera que se la quieren sacar de encima sin saber a dónde llevarla, querían que firmara a toda costa que la sacaran”, dijo.
En cuanto a la posibilidad de un traslado a Argentina, agregó: “En principio nos dijeron que debido a la presión del avión, es imposible que pueda volar”.
Ante esta situación, esta semana, los familiares de Carolina crearon la cuenta de Instagram @todosporcaromx, donde solicitaron la asistencia de Carlos Tomada, el embajador argentino en México. “Al ser extranjera, es necesario que el hospital hable con el área de Trabajo Social, y que Trabajo Social se comunique con los hospitales cercanos. Hasta el momento, no hemos recibido ninguna novedad por parte del Consulado”, expresó Florencia Chincuini, amiga de la joven cordobesa, en comunicación con el citado medio.
“La gente se retira a las 6 de la tarde, y es otro día más que Caro pasa en ese hospital sin poder ser trasladada”, señaló.
Por otra parte, respecto a la impactante escena que Carolina presenció antes de sufrir el ACV, Florencia relató: “Estaba en un bar de la playa y fue testigo de la muerte de una persona. No sabemos bien en qué condiciones fue, ya que lamentablemente no podemos comunicarnos con ella. Apenas tuvo este episodio, al llegar a su casa, comenzó con convulsiones, perdió el habla, sus ojos se desviaron, y la llevaron automáticamente al hospital”.
“Después de eso, no entendía nada, se había olvidado de todo”, añadió. Un grupo de amigos llevó a la joven cordobesa al hospital Playamed de Playa del Carmen, donde “permaneció dos días inconsciente”. Aunque la estabilizaron y le dieron el alta, continuó experimentando vómitos y mareos.
“Lamentablemente no estamos consiguiendo novedades ni información de parte de ninguno de los hospitales y nadie se está haciendo cargo de Carolina: su vida es una bomba de tiempo. Necesitamos contactar con un hospital cercaron lo antes posible. Que alguien la ayude, por favor”, fue el último pedido de ayuda que publicó Chincuini en Instagram.