Los Bomberos Voluntarios y brigadistas de Córdoba informaron que el incendio forestal que se había desatado en Loma del Tigre fue controlado durante la noche, mientras que el foco que fue detectado al norte de la provincia continuaba activo. Algunas familias tuvieron que ser evacuadas ante el avance del fuego.
Durante la jornada del martes, las autoridades provinciales reportaron la existencia de dos focos que se desarrollaron en un sector conocido como Loma del Tigre, que se encuentra en la jurisdicción de Villa Berna, ubicada en el área del Valle de Calamuchita, y en el paraje llamado El Durazno, que pertenece al distrito de Minas.
Cerca de las 20 horas, el Ministerio de Gobierno y Seguridad de la Provincia de Córdoba comunicó que el incendio que se ubicaba en Loma del Tigre logró ser contenido por los más de 75 efectivos y los dos aviones hidrantes que trabajaron en la zona. No obstante, señalaron que las tareas de enfriamiento en el terreno continuarán para evitar que las llamas volvieran a propagarse.
De esta manera, la cartera especializada en seguridad indicó que no habría riesgo de interfase, debido a que el fuego mantiene una distancia de 1.500 metros de las viviendas más cercanas al sitio. Según la información obtenida por el diario Cadena 3, el saldo del incendio provocó que se perdieran pastizales y flora autóctona del lugar.
Por otro lado, el foco que se encuentra en El Durazno se volvió el centro de preocupación del Gobierno de Córdoba, debido a que no pudo ser controlado por los servicios de emergencia que fueron destinados para la tarea. En este sector, estuvieron presentes 45 agentes del cuartel de Bomberos Voluntarios del lugar, quienes recibieron el apoyo de un avión hidrante.
De acuerdo a las fuentes de Télam, varias familias de la zona fueron evacuadas de forma preventiva ante la posibilidad de que éste avance por el territorio. Asimismo, los habitantes de la localidad afectada fueron alojados en el paraje conocido como La Argentina, el cual se encuentra en el oeste de la provincia.
Anteriormente, un informe realizado por la Federación de los Bomberos Voluntarios de la provincia reveló que unas 7.645 hectáreas fueron afectadas por los incendios forestales que se combatieron en el primer semestre del año. La información fue obtenida por medio de los datos recabados por los 12 cuarteles regionales que funcionan en el territorio.
De esta forma, la asociación precisaron que de la porción damnificada, 4.597 hectáreas era destinada a actividades agrícolas, 1.432 para uso ganadero, 333 para pastoreo de hacienda, 423 para la alimentación de bañados, 638 de monte autóctono y 234 que pertenecía al territorio de las reservas naturales.
La investigación señaló que la mayoría de los incendios reportados eran de origen rural, lo cual habría tenido un fuerte impacto en la industria agropecuaria. Una de las principales consecuencias fue la quema de rastrojos, es decir, los cultivos secos que suelen quedar en el suelo después de una cosecha y que ayudan a fertilizar la tierra. En este sentido, el impacto del fuego habría generado una pérdida de fertilidad en esta y generaría un menor rendimiento en la siguiente temporada de siembra.
La cifra que los productores agropecuarios deberán invertir para poder reutilizar las tierras después de los incendios sería de unos $246.271 aproximadamente para los cultivadores de maíz, $193.550 estimarían los productores de girasol, $183.490 con respecto a los sojeros y $151.010 para los encargados de la producción de sorgo.
Por último, en el mismo informe indicaron que un total de 42.368 metros de alambrado utilizado en los campos agropecuarios se quemaron junto con postes y varillas utilizadas para los cercos, debido a que señalaron que son propensos a quemarse y difíciles de extinguir. En términos monetarios, el gasto representaría unos $2.391.340, al calcularse un costo de $130.000 por cada mil metros de alambrado. Además, unas 61 colmenas también resultaron afectadas.