La Armada Nacional uruguaya, en conjunto con el ADES (un voluntariado de salvamento marítimo de ese país), asistió y trasladó este domingo hasta el puerto de Colonia a 12 tripulantes de un velero de bandera argentina que habían pedido auxilio cercanía al Faro de Isla Farallón por problemas con la embarcación que, finalmente, se hundió.
Todo comenzó este domingo a la mañana cuando el personal de la Prefectura del puerto de Colonia recibió, vía VHF, un pedido de auxilio de la embarcación Carpe Diem, explicaron fuentes oficiales a Infobae.
En el pedido de auxilio, los tripulantes argentinos manifestaron que se encontraban “sin gobierno del velero y con una vía de agua”, destacaron las fuentes consultadas por este medio. Estaban en proximidades del Faro de Isla Farallón, un islote del Río de la Plata que pertenece al departamento de Colonia.
De inmediato, el Centro Coordinador de Búsqueda y Rescate en el Mar (MRCC) uruguayo destacó una embarcación semirrígida de Prefectura, y solicitó el apoyo de ADES, con un bote desde el puerto de Colonia, y una lancha desde la ciudad Juan Lacaze, detallaron las fuentes.
Al arribar al lugar, los socorristas brindaron apoyo a los 12 tripulantes que se encontraban a bordo del velero. También, le dieron remolque al Carpe Diem. La intención era llevarlo hasta la Isla San Gabriel, muy cercana al Faro de la Isla Farallón, pequeña y rodeada de piedras -salvo en un sector-, donde algunas afloran, por lo que no recomiendan navegar a menos 1,6 kilómetros de su orilla.
En ese momento, desde Prefectura y el ADES constataron que “la vía de agua era incontrolable”. Entonces, procedieron a desembarcar a los tripulantes en los botes, que luego fueron asistidos por una embarcación que se encontraba en la zona.
“Uno de los tripulantes presentaba signos de hipotermia, y el otro una posible lesión muscular, por lo que ambos fueron atendidos en el puerto de Colonia por una emergencia médica”, explicaron desde la Armada uruguaya y luego comentaron que se encontraban “en buen estado de salud”.
Lo cierto es que, tras el rescate, el Carpe Diem quedó a la deriva y se hundió una hora más tarde.
Las fuentes consultadas por este medio dijeron que los tripulantes rescatados “son todos argentinos y estaban haciendo lo posible para regresar hoy mismo” al país.
Emmanuel Soria y Maximiliano Ludvik
El viernes 27 de octubre se cumplieron dos meses desde la última vez que los argentinos oriundos de Mar del Plata, Emmanuel Soria (34) y Maximiliano Ludvik (29), fueron vistos cuando ingresaban al mar de la costa de Málaga, España, sobre una tabla de pádel surf. Sesenta días más tarde, aún no hay rastros de los amigos que son buscados por sus familias, personas cercanas y conocidos. “Es bastante duro”, expresó el hermano de uno de los jóvenes.
Uno de los hermanos de Emmanuel, identificado como “Nacho” Soria, relató el calvario que comenzaron a vivir desde ese domingo y que empeoraría a partir del 18 de septiembre, luego de que el Gobierno español le pusiera fin a la búsqueda y a los rastrillajes que se realizaban en la zona. “Estamos con psicólogos, con psiquiatras, tratando de estar en familia”, dijo.
A pesar de que el apoyo de las autoridades españolas cesaron, los familiares recurrieron a los medios posibles para dar con el paradero de los amigos. De hecho, eso llevó a que dos hermanos de Soria viajaran a Marruecos, en África, ante la posibilidad de que pudieran encontrarse rastros de los marplatenses: no fue el caso.