Los hechos de inseguridad, los ajustes de cuenta entre bandas criminales y los asesinatos perpetrados por sicarios narcos no dan tregua en Rosario. Y el mes de septiembre arrancó con una nueva víctima fatal. Con este nuevo crimen, el número se eleva a 189 en lo que va del año.
Este viernes por la noche, un joven de 22 años fue asesinado de un tiro en la nuca en el barrio Tiro Suizo cuando estaba en el interior de un Renault 19 color gris. El hecho sucedió sobre la calle Entre Ríos al 5900 y en el lugar se secuestraron entre siete y ocho vainas servidas calibre 9 milímetros.
Fuentes policiales confirmaron a Infobae que la víctima fue identificada como Eduardo Enrique Morera. En el auto registrado no había ningún tipo de pertenecías, ni celular, ni billetera, ni documentación del auto. Por eso, se solicitó al Instituto Médico Legal de Rosario la realización de la autopsia y las pericias dactiloscópicas al cuerpo para lograr su identificación.
Los primeros indicios recabados en la escena del hecho dan cuenta que la víctima fue agredido con múltiples disparos de arma de fuego cuando estaba dentro del vehículo por razones que se investigan.
Efectivos del Gabinete Criminalístico tomaron testimonios a vecinos de la zona y relevaron las cámaras de seguridad. En tanto, los efectivos de la División de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal realizaron tareas investigativas en reserva dictadas por el Fiscal Patricio Saldutti, de la Unidad de Homicidios Dolosos de la Fiscalía Regional Rosario.
El comisario Nicolás D’Ángelo explicó en Telenoche Rosario que a la víctima le habrían disparado desde afuera del Renault 19 gris en el que se encontraba y que no se descarta la presencia de una tercera persona en la escena del crimen (además de la víctimas y el agresor).
“Escuchamos tiros, salimos todos los vecinos a la calle y vimos el auto con el muchacho arriba, cinco o seis tiros escuchamos”, relató un testigo que vive en ese barrio.
El ministro de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni, se hizo presente en el barrio Tiro Suizo y admitió que todavía les queda “muchísimo por hacer” ya que “no son suficientes las inhibiciones que hacemos en las cárceles y sabemos que hay conexiones”. Luego explicó que no necesariamente tenga que ser en este caso ya que está en proceso de investigación.
“No basta con poner a los presos de alto perfil en determinados pabellones, hay que inhibir todas las cárceles (federales y provinciales). Muchos se van a molestar, pero hay que sacar las armas de las calles, sobre todo de Rosario”, agregó el funcionario provincial.
“Las comunicaciones que puede haber entre las cárceles del Servicio Penitenciario Federal es un tema que hemos llevado al Ministerio de Seguridad y Justicia de la Nación. Sabemos que el SPF está interesado por esta metodología de trabajo”, sostuvo Brilloni.
Por último, sostuvo que “el 80 por ciento (de los crímenes) está relacionado con el narcomenudeo, la disputa en el liderazgo por el territorio, muchos líderes están presos y se traslada a las disputas territoriales”.
Lo que le llama la atención a los investigadores es que varios de los recientes crímenes cometidos en Rosario tienen la particularidad de que fueron cometidos contra personas que se encontraban en el interior de vehículos.
Otro crimen sicario
El lunes 28, un grupo de sicarios asesinó a tiros a una pareja que estaba adentro de una camioneta en la esquina de Lima y Uruguay, en la zona oeste de Rosario,
Las víctimas, identificadas como Carlos Alberto Ponce y Fabiana Estela García, estaban en el interior de una Ford Eco Sport gris, cuando dos sicarios pasaron en moto y dispararon al menos cuatro disparos. No está claro el vínculo entre ambos y ese aspecto también es materia de la investigación a cargo del fiscal de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta.
Las fuentes indicaron que el cuerpo de Ponce fue encontrado al volante con un orificio de arma de fuego en el cráneo. Por su parte, García llegó a ser trasladada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez con un tiro en la cabeza y falleció en la madrugada de este martes.
En la escena, peritos forenses secuestraron los celulares de las víctimas y cuatro vainas servidas calibre .40. El material quedó a resguardo de la División de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), a cargo de las medidas ordenadas por el fiscal Spelta.
Minutos después del doble crimen, la Brigada Motorizada de la Unidad Regional II demoró en Dean Funes y Lima a tres sospechosos que se desplazaban en moto y que, supuestamente, respondía a las características físicas de los presuntos atacantes.
No obstante, desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) indicaron a este medio que se les incautaron sus teléfonos y solo se les formó causa por resistencia a la autoridad, ya que por el momento no hay indicios que los relacionen con el ataque.
Los investigadores policiales obtuvieron pocos datos sobre las víctimas por el momento. El hombre tenía un solo registro policial que data de 2017, cuando se secuestró en un domicilio de Perú al 2500 una pistola que tenía la debida documentación. En tanto, la mujer figura en una antigua aprehensión ocurrida en 2009 por una usurpación, aunque no trascendieron detalles de esa causa.