Este miércoles 19 de julio la Ciudad de Buenos Aires se quedó sin servicio de subtes entre las 10 y las 13 horas. La medida de fuerza comenzó a las 9 de la mañana, con la apertura de molinetes en algunas estaciones de todos las líneas. Fue impulsada por la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTByP), entidad que reclama la reducción de la jornada laboral para los trabajadores de este servicio de transporte público de 36 a 30 horas semanales.
El gremio, además, le plantea a la empresa EMOVA, concesionaria del servicio, que los empleados desarrollan sus tareas expuestos al asbesto, un material nocivo para la salud, al que atribuyen enfermedades graves contraídas por trabajadores. La empresa, por su parte, rechaza esta versión, y asegura que es inviable acceder al pedido de reducir un día la semana laboral de sus empleados.
En ese marco, el sindicato anunció y aplicó el siguiente cronograma de cortes a modo de protesta:
De 9 a 10 hs se abrieron los molinetes en las estaciones:
San Pedrito, Línea A
Rosas, Línea B
Constitución, Línea C
Congreso de Tucumán, Línea D
Virreyes, Línea E
Facultad de Derecho, Línea H
De 10 a 13hs se interrumpió el servicio de todas las lineas de Subte y el Premetro.
Inicialmente, la protesta de esta semana estaba prevista para el martes 18 de julio. Finalmente, Andrea Salmini, secretaria de prensa de AGTSyP - Metrodelegados, anunció que el paro se realizaría un día después. “Lamentablemente tenemos que anunciar nuevas medidas de autodefensa porque no hemos recibido ninguna propuesta de las empresas Emova y Sbase”, explicó la dirigente el fin de semana.
Te puede interesar: “Para dormir todo el día”: el video viral de un gremialista del subte que explicó los motivos de la protesta
“Les pedimos disculpas a los usuarios por los inconvenientes que les pudiéramos ocasionar, y los invitamos a sumarse a nuestro reclamo por un subte libre de asbesto”, agregó.
Según el sindicato, la presencia de asbesto fue detectada en el año 2018, luego del fallecimiento de tres trabajadores. Además, denuncian que 87 empleados y 1 pasajera resultaron afectados, en tanto que 2.150 trabajadores deben asistir a una visita médica todos los años para verificar que no haya secuelas por la exposición a este grupo de minerales fibrosos caracterizados por su resistencia al calor y a la corrosión.
La respuesta de la empresa EMOVA, en tanto, admite que el material está presente el lugar de trabajo de los empleados del subte, aunque niega el impacto en su salud. “La empresa trabaja activamente en un plan de desasbestización en continuidad con el proceso iniciado hace 5 años. Este trabajo se realiza a través de una mesa interdisciplinaria en la que participan también las entidades gremiales y que funciona en la Dirección de Protección del Trabajo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires”, indicó.
Los reclamos en este servicio de transporte se sostienen desde hace meses. La primera semana de julio la modalidad elegida por el gremio había sido un escalonamiento de la interrupción del servicio, esto es, cada dos horas paraba una línea y la protesta pasaba a la siguiente. En esta ocasión, el paro será total.
“Seguiremos con las medidas tratando de que se haga lo que se tiene que hacer, que es retirar el asbesto, cambiar las flotas, poner a todos los trabajadores bajo vigilancia médica y reducir las jornadas de trabajo para minimizar los efectos de todos los factores de insalubridad”, afirmó Claudio Dellecarbonara, miembro del secretariado ejecutivo de AGTSyP.
Seguir leyendo: